Todo aquel que empieza una carrera profesional normalmente lo hace con gran ilusión y muchas expectativas sobre el éxito que puede lograr. Sin embargo, es evidente que esto no siempre sucede y, cuando así ocurre, no suele ser fácil reconocer que uno se ha equivocado al tomar decisiones. Desgraciadamente, muchos profesionales no se toman el tiempo necesario para planear su carrera laboral y la empiezan sin plantearse claramente unas metas y objetivos, con la simple intención de que todo salga bien. A veces, incluso, sin tener claro dedicarse a aquello que realmente les apasiona o a una especialidad que les permita explotar todos sus talentos.
Por otro lado, es posible que durante nuestra trayectoria nos encontremos con dificultades (un despido, quizá) que nos hagan pensar que nos hemos equivocado en la elección. O a veces no es problema de uno, sino que en un momento dado puede que nuestro sector pase por dificultades que nos hagan ver que debemos cambiar de rumbo… ¿Cómo podemos hacerlo? ¿Cómo replantear nuestra trayectoria laboral? Aunque está claro que cada caso es distinto, desde Jobomas ofrecen algunos interesantes consejos por si te ves en la tesitura de enfrentarte al difícil momento de empezar una carrera laboral desde cero.
Si no sabes qué hacer ni a qué dedicarte
Antes de deprimirte, mira el lado positivo: Tienes la oportunidad de volver a comenzar dedicándote a lo que te gusta y lo que sabes hacer bien. Además, tienes la ventaja de que ya sabes en dónde no quieres estar (así que algo has aprendido). Toma todo el tiempo que necesites para analizar a qué quieres dedicarte y hasta dónde quieres llegar. Analízate a ti mismo y, si es necesario, apóyate en otras personas o busca la ayuda de un profesional para orientarte. No temas experimentar cosas nuevas, al contrario, prueba con todas las opciones que puedas hasta que encuentres la correcta para ti. A partir de ahora, eres dueño de tu futuro y puedes construirlo de manera que obtengas el máximo beneficio.
Sabes qué quieres pero estás agotado mental y emocionalmente
La buena noticia es que sabes exactamente hacia donde quieres ir y eso es muy positivo. Sólo necesitas deshacerte del cansancio y la desmotivación con la que cargas. Así que tómate un respiro, dedica tiempo a hacer cosas que te gusten, a despejarte, descansar y encontrar la inspiración que necesitas para volver con las pilas cargadas y comenzar un nuevo proyecto. Aprendiste la lección, de modo que aplícalo y ve tras lo que quieres sin miedos y con la consciencia de que esta vez puedes lograr un futuro más sólido.
Sabes lo que quieres pero no tienes recursos para ello
Lo más importante es no frustrarte ante la situación, ni castigarse por haber tomado una mala decisión anterior. Si sabes lo que quieres, y estás decidido a ir tras ello, lo importante ahora es que concentres toda tu energía en obtener lo que necesitas para hacerlo realidad. No es sencillo, es verdad, pero tu sueño vale cualquier esfuerzo y sacrificio. Así que no pierdas tiempo culpándote a ti mismo ni buscando excusas para justificar que es inalcanzable. La clave es ser paciente, constante y, sobre todo, creativo. Siempre hay una forma de lograr lo que te propones, sólo es cuestión de tener una estrategia y no desesperar. Después de todo, en este punto no tienes nada que perder y la única opción posible es seguir adelante.
Replantearse el futuro laboral es una etapa difícil por lo que lo importante es conservar una buena actitud y ser consciente de que las experiencias vividas probablemente te han dejado un valioso aprendizaje que ahora podrás aplicar para ser un mejor profesional.
Actualidad Laboral / Con información de Ticbeat