Cuando estés realizando entrevistas a un candidato que quiere optar a conseguir un puesto de trabajo en tu empresa, es importante que tengas en cuenta que va a intentar hacer cualquier cosa por agradarte, y por parecer el candidato ideal y más preparado. Es posible que te encuentres con gente tan brillante que te parezca difícil que todo sea verdad; pero por el contrario, también es muy probable que te encuentres con personas que, aunque intenten engañarte, no cumplan los requisitos requeridos para el puesto y solo te hagan perder el tiempo. A ellos, es a quienes debes aprender a identificar. Estas son algunas de las señales que te deben hacer sospechar sobre la veracidad de lo que el candidato te está contando:


Respuestas cortas


Normalmente, cuando preguntas a una persona sobre algo que es mentira, lo que esa persona intenta hacer es esquivar la pregunta, cambiar de tema, y a no ser que sea un profesional del engaño, le resultará muy complicado inventarse una historia sin dejar cabos sueltos. Cuando preguntes a un candidato sobre alguno de los aspectos, capacidades o experiencias expuestas en su currículum, presta atención a su forma de responder. Si lo que cuenta es verdad, intentará explayarse y contar con pelos y señales su experiencia. Si por el contrario te contesta de manera casi obligada y con monosílabos, es muy probable que te esté mintiendo.


Lenguaje corporal nervioso


Evitar el contacto visual, mover la pierna o las manos demostrando nerviosismo, o sudar en exceso, son algunas de las señales corporales de que algo no va bien. También existe la posibilidad de que el estrés delate de una persona excesivamente nerviosa o tímida, pero ten en cuenta que es muy difícil encontrarte con alguien que en una entrevista de trabajo te mienta, mirándote a los ojos.


entrevista


No tiene tantas habilidades en persona como en el currículum


Inflar un poco el currículum en algunas cuestiones no lo concebimos como una estafa, pero cuidado, porque es muy fácil que te descubran. Las trampas más comunes en los currículos suelen ser subirnos unos niveles los idiomas que manejamos, asegurar experiencia en el manejo de algunos programas informáticos de los que solo hemos oído hablar, poner unos cuantos meses más de experiencia en cada lugar… Al final, descubrir las mentiras es algo tan sencillo como poner al candidato a hablar en los idiomas que dice que maneja, a utilizar los programas informáticos en los que dice tener experiencia, o hacer una llamada telefónica para comprobar la veracidad de su trayectoria en el sector.


Habla más como empresa que como individuo


Cuando un candidato te relata su experiencia y habla más en plural que en individual, es decir, más en nombre de la empresa que como trabajador, algo no va bien. Si al preguntarle por sus logros alcanzados te cuenta los objetivos grupales conseguidos como empresa, algo no va bien. Pregúntale cuál era su rol y sus competencias.


Actualidad Laboral / Con información de Forbes España