Los importadores estadounidenses están mejor preparados para los inminentes aranceles que el presidente electo Donald Trump ha prometido imponer a los productos procedentes de China, pero la mayoría no parece estar apurando significativamente los pedidos para llevar esos productos a través de los muelles antes de su toma de posesión.
Más bien, los temores arancelarios son solo uno de los varios factores que empujan a los importadores estadounidenses a reservar más de lo habitual durante esta temporada alta extendida.
En el primer mandato de Trump, los importadores estadounidenses al principio no estaban seguros de la seriedad con la que el presidente cumplía con sus amenazas arancelarias; De hecho, iba muy en serio.
En su segundo mandato, es menos una cuestión de “si” y más de “cuándo” Trump implementará aranceles más duros a China, que según él serán superiores al 60 %.
La medida en que los importadores estadounidenses adelantan las cargas marítimas tiene implicaciones para el precio y el servicio del transporte marítimo.
El primer mandato de Trump estuvo marcado por tres oleadas de crecientes aranceles estadounidenses a los productos chinos y dos aplazamientos de implementaciones. Eso creó cinco períodos en los que los importadores estadounidenses movieron bienes antes, creando artificialmente una demanda que alimentó diferentes grados de volatilidad de las tarifas al contado y redujo la confiabilidad de los océanos. Y, en menor grado, ralentizó el flujo de carga a través de los puertos.
Esta vez; sin embargo, saber que más aranceles serán una realidad en lugar de una posibilidad les da a los transportistas una base más firme para analizar posibles respuestas y hacer planes, dijo Chris Rogers, jefe de investigación de la cadena de suministro de S&P Global Market Intelligence. S&P Global es la empresa matriz del Journal of Commerce.
También hay cierto grado de conocimiento de qué tipos de bienes están primero en la línea de fuego para aranceles más altos de EE. UU., dado que la primera administración Trump suspendió en diciembre de 2019 los aranceles dirigidos a las importaciones de teléfonos móviles y computadoras portátiles de China. Estos artículos de alto valor podrían transportarse fácilmente a través de un transporte aéreo más rápido en lugar de un transporte marítimo para evitar por poco cualquier plazo arancelario.
Más productos de China
Sobre la base de las conversaciones con tres propietarios de carga y varios transportistas, se está produciendo y continuará un cierto grado de concentración anticipada para evitar los inminentes aranceles chinos. Los directores de logística de tres importadores medianos dijeron que tenían el objetivo interno de llevar más productos de China a los puertos estadounidenses para el 1 de enero.
“Estamos experimentando un aumento abrumador en las demandas de reservas, con un espacio disponible cada vez más limitado tanto para el USWC como para el USEC”, dijo Marc Meier, jefe global de carga marítima de Toll Global Forwarding, al Journal of Commerce.
La demanda de reservas, más fuerte de lo normal, dijo Meier, se debió a una letanía de factores: los temores arancelarios chinos, las fuertes salidas en blanco y la inminente fecha límite del 15 de enero para que los trabajadores portuarios y los empleadores lleguen a un acuerdo o se arriesguen a otra huelga a lo largo de las costas este y del Golfo de Estados Unidos.
Más allá de saber que se avecinan aranceles, los importadores estadounidenses tienen costos de transporte más altos que durante el primer mandato de Trump, gracias a las tasas de interés más altas. Los precios más elevados para almacenar bienes impulsarán a algunos importadores a ser más conservadores con la cantidad que cargan al principio.
Las reservas de importaciones de Estados Unidos desde China no han aumentado a pesar de la amenaza arancelaria, según el proveedor de software de logística e2open.
“Si bien en noviembre se ha producido un ligero repunte en comparación con octubre, es probable que esto se deba al menor volumen de pedidos durante las vacaciones de la Semana Dorada de China en octubre”, dijo e2open en un comunicado al Journal of Commerce.
Las importaciones estadounidenses desde Asia aumentaron un 10,5% interanual en octubre, según PIERS, un producto hermano del Journal of Commerce dentro de S&P Global.
Stephen Nothdurft, vicepresidente de ventas de América del Norte en el transportista MOL Consolidation Service, dijo que los aranceles estaban jugando solo “un pequeño papel” en la extensión de los volúmenes de la temporada alta. También esperaba que los importadores que dependen de las costas este y del Golfo esperaran a la fecha límite del 15 de enero.
“Nadie está buscando apresurarse para adelantarse locamente a esta situación de la costa este”, dijo. “[Y] nadie está cargando hacia adelante con el [riesgo] arancelario”.
Ese parece ser el sentimiento de aproximadamente 100 transportistas encuestados por Ravi Shanker, director gerente de Morgan Stanley y analista principal para el transporte de carga en América del Norte. Más del 70% de los encuestados dijeron que no planeaban reabastecerse de manera diferente debido a que Trump ganaría un segundo mandato.
De esos transportistas, un poco más de un tercio dijo que está considerando “moderar o aumentar significativamente” los inventarios antes de los aranceles, mientras que un sorprendente 42% de los transportistas no espera cambiar su comportamiento ante los aranceles inminentes.
Actualidad Laboral / Con información de Revista EyN
