Bien decía Jeff Bezos que la marca personal es aquello que dicen de nosotros cuando nos retiramos de un lugar. Y, las redes sociales están llenas de oportunidades de contar sobre nosotros, nuestra vida, seres queridos o trabajo, pero no quiere decir que todo se deba poner.
Dejando atrás el regaño, vale la pena pasar al lado constructivo: ¿cómo poner tus redes sociales al servicio de la construcción de tu imagen personal, la construcción de tu marca o la promoción de tu negocio? No es tan difícil, pero por algo se debe empezar.¿cómo poner tus redes sociales al servicio de la construcción de tu imagen personal, la construcción de tu marca o la promoción de tu negocio? No es tan difícil, pero por algo se debe empezar.
Estos tips que nos da Armando Ruiz, consultor en marketing y relaciones públicas para startups y pymes, te pueden servir como punto de partida para comenzar a construir tu imagen profesional en internet:
1- Define la imagen que quieras comunicar
Busca tu nombre o de tu negocio en Google. ¿Qué encuentras? Puede que te topes con cosas que nunca creíste que existieran, perfiles que olvidaste, o referencias de empleos pasados. ¿Es eso lo que quieres que la gente sepa de ti o de tu negocio? A partir de ahí, define qué imagen quieres dar: profesional, confiable, irreverente, relajado, una joven promesa de los negocios o un líder en su ramo. Así, podrás definir qué mensajes vas a dar y qué cosas no debes publicar, pues no aporta nada a esa imagen.
2- Identifica tus áreas de conocimiento e interés
Tal vez te apasione la gastronomía, te llame la atención ilustrar, leer de marketing, diseño de interiores o internet. Quizá te guste la robótica y tu trabajo consiste en mostrar que es una disciplina divertida y útil. Sea cual sea el área que te apasione, incluso si es diferente a lo que estudiaste o a tu empleo actual, es un buen punto de partida para construir una imagen propia.
Cuando hablas, escribes o compartes información de algo que te apasiona, se nota un auténtico interés. Así es más sencillo que los demás se convenzan de que esa área es apasionante. Además, ya con eso en mente, podrás tener una mente más receptiva ante información relacionada con lo que te interesa.
3- Haz una limpieza de contenidos
Revisa lo que está en tus redes: fotos, videos, publicaciones en las que te han etiquetado, tus publicaciones en el muro de Facebook, o si está completo y actualizado tu perfil de Linkedin. A continuación, elimina aquello que deje de aportar algo positivo a la imagen que quieres construir: desde chistes pasados de tono hasta quejas de tu trabajo. No permitas que la negatividad sea parte de tu imagen (a menos que quieras que te ubiquen como una persona negativa, claro).
Ya que estás en eso, también revisa las cuentas que sigues: ¿cuáles te dejan información interesante? Incluso, descubrirás algunas que llevan meses o años sin publicar (hay herramientas como Tweetmap que te ayudan a detectarlas). Ve cuáles usuarios realmente te dan información valiosa y elimina las que sean irrelevantes.
En el caso de Facebook, eliminar amigos no es una buena opción, pero puedes dejar de seguir a aquellos que saturan tu página de noticias con cosas irrelevantes; así te dejará de llegar lo que publican, sin tener que borrarlos de tu lista.
4- Unifica tu imagen
¿Te ha pasado que buscas a una persona en Google y aparecen 2 cuentas de Facebook, 3 cuentas de Twitter, una de Instagram y otra de LinkedIn, todas con diferente foto de perfil? Difícil saber cuál es la buena y cuál no. Lo ideal es que identifiques las cuentas que tienes activas, borres las que llevan un rato abandonadas y las que queden, compartan una imagen unificada. Para empezar, que todas tengan la misma foto de perfil, una misma bio y si tienes una página web o un blog, inclúyela en tus perfiles. Así, la gente que te busque sabrá cuales son tus redes “oficiales”, aún cuando no tengas verificadas tus cuentas. En caso de ser pyme, se pueden verificar de manera más sencilla.
5- Sigue a cuentas que hablen de tu sector
La mejor forma de encontrar información relevante es seguir a cuentas o personas, que sean líderes en el ramo: empresas, museos, universidades, columnistas, investigadores, asociaciones o portales especializados. Así podrás estar actualizado sobre las novedades en tus áreas de interés.
En caso de que quieras conocer más sobre una o más áreas, como por ejemplo deportes y tecnología, es recomendable crear listas como las que ofrece Twitter. Donde puedes agregar cuentas por separado y así leer solamente las que estas publiquen, sin que se pierdan en el mar de información que recibes a diario.
6- Comparte información de tu interés
Una amiga cercana a nuestro experto (Armando Ruiz), que actualmente es speaker en congresos de marketing empezó su carrera compartiendo información de esta área, que no alcanzaba a caber en el boletín de la empresa en la que trabajaba. Con el tiempo, comenzó a buscar en más y mejores fuentes hasta conocer sobre las nuevas tendencias en el sector; crecieron los seguidores y de ahí comenzó a escribir contenido propio.
A veces es difícil escribir con regularidad, grabar un video o un podcast, pero la ventaja de seguir cuentas de tu interés es que algo de lo que publiquen te puede interesar y lo quieras compartir con quienes te siguen, desde tu muro de Facebook hasta un simple retweet. Incluso, puede sumar a tu perfil profesional si lo compartes en LinkedIn.
7- Genera conversación
Las redes sociales no son un canal de una vía, como la radio, periódicos o televisión, sino que permite un intercambio de ideas entre los usuarios. Asumiendo que sabes las consecuencias negativas de usarlas solamente para pelear con otros usuarios o insultar a algún famoso que no soportas, hay que recalcar que también sirven para construir una buena impresión de ti. Puedes pedirle opinión o aclarar una duda con algún especialista en tu sector, mencionar a aquellos cuyos videos o blogs te gustan, o dar tu lista de cuentas favoritas para aprender de viajes, cocina, cine o tecnología. También, conforme crezcan tus seguidores, puedes hacer preguntas abiertas, poner encuestas o desarrollar un tema en varios tweets, apoyado por los hashtags más populares del día.
Estas acciones se conocen como “abrir conversación” pues, están enfocadas en generar una respuesta de tus seguidores o de personas interesadas en el tema. Incluso podrías dar una opinión extensa por entregas, a manera de mensajes cortos, como los que hace Paul Krugman o Neil DeGrasse Tyson.
8- Escribe algo propio
Mucha gente se detiene en este punto porque no se consideran buenos escritores. Nadie nació con esa habilidad y solamente puede desarrollarse con la práctica. La idea de que identificaras tus áreas de interés, buscaras información e interactuaras con otros usuarios es para ejercitar tu criterio y formarte una opinión informada. Para este punto, seguramente, tendrías un punto de vista distinto de muchas personas a las que lees y te gustaría compartir tu punto de vista. Un tweet de queja o un comentario en páginas de terceros no duran nada. Para eso existen los blogs: espacios en los que puedes escribir sin límite de caracteres, agregar imágenes o videos que sustenten lo que escribes, e ir mejorando con el tiempo. De estos, la mejor opción es Medium, que te permite crear un perfil de manera instantánea sin preocuparte por cosas de diseño. Además, lo que escribas es fácilmente compartible en Twitter y Facebook.
Existen otras formas de crear algo propio si no tienes tiempo: una transmisión en Facebook Live o Periscope son buena opción si quieres compartir tu opinión de un evento, una reflexión o incluso dar una clase. Todo suma pero no te agobies, no se trata de convertirse en un gurú de la noche a la mañana, sino de ir practicando. Puedes verlo como un hobby, lo cual ayuda a no presionarte.
9- Entérate de los eventos claves de tu área
Las páginas de Facebook ayudan a conocer los eventos clave de tu sector, como los que organiza por ejemplo, Entrepreneur a lo largo del año. Así, puedes investigar sobre eventos de tu sector: cursos, conferencias, sesiones de networking, presentaciones de libros o talleres. Algunos de ellos, incluso, son gratuitos. Esto te permitirá, no solamente detectar oportunidades para ampliar tu conocimiento, sino hacer networking, es decir, conocer a personas con gustos e intereses afines con los que puedas hacer alianzas o poner en marcha nuevos negocios.
10- Comparte tu trabajo e intereses
Si tienes la fortuna de dedicarte a lo que te apasiona, ¡compártelo! Puede que no estés en la empresa ideal o con el trabajo perfecto, pero dar a conocer información que te parezca relevante te mantiene en el juego para nuevas oportunidades. Por ejemplo, Ruiz conoció a una escritora exitosa cuyo libro surgió de un blog producto de sus entrevistas, ya que era periodista. A partir de ahí, conoció lo necesario para comenzar a escribir de finanzas personales, de ahí un editor dio con su blog y le propuso hacer un libro. Actualmente lleva más de 200,000 copias vendidas.
11- Súmate a temas, tendencias y causas
Si algo hemos aprendido de redes sociales es que la gente puede agruparse para temas o causas, que consideren adecuadas: desde ayudar a víctimas en un desastre natural, pedir el cambio de una ley, o simplemente hacer noches de networking, dar charlas o para compartir conocimiento de su tema.
No te quedes simplemente en publicar y retomar información. Únete a la conversación utilizando hashtags o viendo los temas del día y busca conexiones con tu área de expertise, algo que se pueda relacionar con tu imagen profesional. Eso demuestra no solamente que te informas de lo que ocurre en tu entorno, sino que cuentas con conocimiento de tu tema.
12- Incluye tus redes sociales en tu tarjeta de presentación
Adiós al viejo formato de las tarjetas blancas con tu nombre, correo electrónico y teléfono sin nada más que el logo en el reverso. Si quieres ganarte la confianza de tus contactos de negocios, debes abrirles las puertas a tu imagen profesional. Como las redes sociales pasarán a ser parte de la imagen que quieres comunicar, es recomendable incluir los perfiles de las cuentas que tengas como públicas o en las que tengas mayor actividad, como LinkedIn, Twitter o tu blog. Si no quieres cambiar el esquema de tu tarjeta, puedes incluirlas al reverso como complemento de la información principal.
Esto es recomendable para profesiones que tengan que ver con medios o industrias creativas como publicistas, diseñadores, periodistas, productores, community managers, relacionistas públicos o directores de agencias, así como emprendedores ávidos de construir una red de contactos profesionales en poco tiempo. ¿Qué mejor forma de contacto que en redes?
Aora, puedes tomar estos consejos como punto de partida para dejar de ver las plataformas online como distractores y convertirlas en herramientas para tu promoción personal y el crecimiento de tu negocio.
Actualidad Laboral / Con información de Entrepreneur