07-07-2014
"No podemos plantearnos, ni muchos menos ejecutar, un proyecto de reindustrialización o industrialización, con una mentalidad rentista vigente entre nosotros", así lo señaló el presidente de la Confederación Venezolana de Industriales, Eduardo Garmendia, al dar a conocer los lineamientos de la propuesta de la organización denominada "La Ruta", en el marco del Congreso Conindustria 2014.

El máximo dirigente del sector manufacturero venezolano señaló que la propuesta de Conindustria es un reto para mirar hacia un futuro que no debe parecerse en nada al presente. De entrada, dijo que la experiencia y las mejores prácticas mundiales han permitido identificar que la ruta conlleva dos estrategias simultáneas: una de reindustrialización y otra de industrialización.

Con la primera, se impone el compromiso por avanzar con el acervo productivo existente; y a la par, y con la misma urgencia y constancia, con la segunda se requiere de una propuesta que materialice los esfuerzos del industrial innovador, motivador. Para ambos casos, hay una variable que las iguala que es asumir riesgos.

Garmendia enfatizó en que para avanzar en el hecho industrial es necesario construir, fortalecer y proteger un sólido marco institucional. Este marco implica reglas de juego y normas claras, confianza, actuación de jueces y árbitros justos, predictibilidad sobre una agenda pública a desarrollar y sus consecuencias y cambio en la noción de propiedad privada.

“La propiedad en el ámbito industrial debe ir acompañada de lo que denominamos una nueva conciencia empresarial entre nosotros mismos, los industriales. La ruta propuesta nos llama a abandonar la mentalidad rentista y abrazar las banderas de la competencia, de la productividad, de la innovación”. A su juicio, es el momento de salir a buscar el riesgo, asumir los retos de formar parte de cadenas de valor innovadoras.

Indicó que “así como venimos pidiendo con urgencia un cambio en el modelo económico que se le quiere imponer al país, es necesario también que nosotros, empresarios industriales, asumamos un cambio en nuestra mentalidad y conducta”.

Reconoció Garmendia que exigir simultáneamente la vigencia de un marco institucional, de la propiedad privada y abandonar mentalidades y posiciones rentistas, no es asunto fácil. Pero es, definitivamente, la ruta.

En ese sentido, prometió que a partir de ahora se establecerán procesos de interacción con los sectores que forman parte del quehacer industrial, tanto con los empresarios como con los trabajadores, con la finalidad de crear cadenas de valor que tengan significado para el desarrollo de Venezuela.

Actualidad Laboral