El sector industrial venezolano registra una disminución de su producción alrededor de 72%, al cierre del tercer trimestre de 2015, según el resultado de la encuesta de coyuntura presentada por el presidente de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), Juan Pablo Olalquiaga. “Si nos vamos a la pequeña industria, que es una de las más afectadas, nos damos cuenta de que casi el 80% ha tenido unas disminuciones entre poco y mucho de sus volúmenes de producción”, explicó.

Los factores que han afectado la actividad de las empresas privadas, han sido, los controles de cambios y de precios, fallas de los servicios públicos, problemas con las guías de movilización, la aplicación de la Ley Orgánica de Precios Justos, entre otros.

Y es que las expectativas a futuro continúan en terreno negativo, tendencia que comenzó desde el 1er trimestre 2013. Esto es, aclaró el dirigente gremial, que son más las empresas que estiman que les va a ir peor, ubicando el indicador en 39,16, para el período en estudio.

“Condiciona la previsibilidad de que vaya a haber un cierre masivo de empresas, en la medida en que no vayan cambiando las condiciones de entorno dentro del cual las empresas se van desenvolviendo”, expresó Olalquiaga. Todos los sectores, agregó registran “disminuciones importantes de materia prima”.

Aunque es enfático en advertir sobre la ausencia de cifras oficiales sobre el comportamiento de la economía, estima que la caída del sector manufacturero supera el 10%, en lo que va de 2015. “Nunca en Venezuela hemos tenido paralización de empresas como hemos tenido este año”, en promedio, el uso de la capacidad instalada se encuentra en 47,2%.

“Es de suponer que el 1er trimestre del próximo año va a ser un trimestre de menor nivel de abastecimiento, (porque) en la medida en que tenemos menos despachos al sector comercio; y el sector comercio, a su vez, va consumiendo menos porque se siente amenazado, se le van terminando los bienes terminados, cuando arranque enero va a tener que esperar que todo el engranaje industrial, comience. Y no va a comenzar sino muy débil y muy aleatoriamente, hay muchas líneas que no van a comenzar”, explicó el presidente de Conindustria.

Empleo en la industria

Según Olalquiaga, a pesar del entorno negativo que atraviesa la industria venezolana, y con un futuro incierto, las empresas han hecho lo posible por mantener la nómina, aunque eso represente un impacto importante en sus costos. “Mantener las nóminas, con menos volumen de producto, lo que va haciendo es encarecer cada vez más los productos que van saliendo”.

En la medida en que se han ido agotando las actividades en las industrias, la decisión ha sido enviar a los trabajadores a sus casas con goce de sueldo básico. Sin embargo, esto representa una disminución importante en el ingreso mensual “sin las bonificaciones que normalmente tendrían por producción o asistencia”, en algunos casos representa más del 50% del sueldo, según han dicho dirigentes sindicales.

Pero, Olalquiaga no cree que estas decisiones sobre los trabajadores haya incrementado la conflictividad laboral. De acuerdo con la información que maneja, la mayoría comprende las dificultades de las empresas, para producir.

Actualidad Laboral / Adriana Salazar Salas