01-05-2017
Los aumentos salariales unilaterales impuestos por el Gobierno, definitivamente, no pasan de ser “pan con cola para hoy, y pobreza extrema para mañana”, porque no responden a un previo financiamiento productivo, y serán cargados al desorden fiscal y monetario que reina en el país, según señala Consecomercio.
“Lo que los trabajadores venezolanos necesitan es dedicarse a producir en y para una economía moderna, sin inflación y menos ilusiones monetarias”, indica este órgano gremial en nota de prensa.
Consecomercio considera que si hubiera algo especial que celebrar el 1 de Mayo, es escuchar al sector laboral del país haciendo causa común con los empleadores privados en el reclamo de que Venezuela modernice su economía; que el Gobierno no siga fortaleciendo el empobrecimiento de los ciudadanos, sean trabajadores o pensionados.
También que se le preste atención al hecho de que cuando los aumentos salariales se producen con base en lo que determina el capricho gubernamental, las pequeñas y medianas empresas deben prescindir de trabajadores o cerrar sus puertas.
De igual manera Consecomercio explica que estos aumentos no le llegan a los desempleados y quizás nunca les lleguen, porque en Venezuela no es posible abrir más empresas, generar más empleos, si el Estado hace y decide todo en materia salarial y de costos, a la vez que asfixia a los productores primarios, a la industria y al comercio con controles de cambio y de precios, una Ley de supuestos Precios Justos, y obliga a los consumidores a comprar y consumir lo que pueden; no lo que desean.
Actualidad Laboral / Nota de prensa