14-02-2018
Quizá no haya día de la semana más vituperado que el lunes. Una encuesta de Spotify de 2016 concluyó que casi dos tercios (64%) de las personas no se sienten motivadas el primer día de la semana laboral. La encuesta descubrió que usamos café, música, ejercicios y otros mecanismos de compensación para lograr pasar el día. Es que el lunes tiene una inmerecida mala fama. Es el primer día de la semana laboral, un día para hacer que sucedan cosas. A continuación siete consejos para volver a amar los lunes.
Cuide sus palabras
Deje de aceptar la narrativa de que los lunes son tan malos, dice Ben Rooks, asesor de carreras de la ciudad de Nueva York. "Hay una conciencia colectiva de que los lunes son una porquería", dice. Verbalizarlo o escribirlo en las redes sociales refuerza esa actitud, así que deje de hacerlo. "Los lunes no son una porquería. Es la vida de la gente o su trabajo lo que es una porquería. El lunes es solo un día en el calendario", agrega.
Quejarse tiene su costo, por lo que cambie su lenguaje y comience a concentrarse en los aspectos positivos del lunes. Empieza una nueva semana en el trabajo, lo que significa que tiene trabajo. Probablemente tiene opciones para mejorar la situación, dice Brook. También puede ser una buena idea tomarse un descanso en las redes sociales para ponerse más contento.
Nombre el problema
Si tiene temor crónico a los lunes, explore de dónde viene ese sentimiento, dice Nicole Lewis-Keeber, psicoterapeuta y asesora de Lancaster, Pennsylvania. "No sé usted, pero yo me he privado de la mitad de mi domingo o más en el mundo corporativo o como empresaria, preocupada por lo que sucedería en la semana", dice.
Lewis-Keeber recomienda buscar las razones por las que teme el lunes. ¿Hay un proyecto que le preocupa? ¿Tiene problemas para hacer sus tareas o tiene inconvenientes con un individuo en particular? Una vez que nombra la fuente de su mal sentimiento respecto de la vuelta al trabajo al final del fin de semana, puede comenzar a reubicar las cosas o actuar para resolverlo.
Prepárese
Prepare las condiciones para un gran comienzo de la semana planificando algo en el fin de semana para hacerse sentir que "armó algo divertido", dice Christine M. Allen, presidenta de Insight Business Works en Syracuse. Comenzará la semana sintiéndose satisfecho. "Planifique su almuerzo y trate de llegar al trabajo un poco temprano. Paradójicamente esto también ayuda a iniciar el trabajo calmo y lo prepara para un buen día", asegura la especialista.
Elimine algo de la preocupación por el lunes creando un plan, aconseja Lewis-Keeber. Lo haga el viernes antes de irse del trabajo, el domingo por la noche o en el momento que le sirva, tómese unos minutos para preparar una lista de cosas por hacer o una agenda para saber qué tiene que hacer.
Darse un gusto
Integrar rituales y otras actividades que disfruta en su lunes también puede ayudarlo a crear asociaciones positivas, dice Leah Weiss, consultora de Palo Alto, California, y autora del libro Cómo trabajamos: Viva su propósito. Weiss da cursos sobre conducción compasiva en la escuela de graduados de negocios de la Universidad de Stanford. Si le gusta hacer ejercicio, tome una clase el lunes por la mañana para disfrutar el comienzo del día. "Viaje al trabajo de un modo que puede ser un poco menos eficiente pero que sea más placentero. Camine un poco o haga una cita para el almuerzo o para tomar un café con alguien cuya compañía disfrute", dice.
Cultive amistades
Crear amistades en el trabajo también puede ayudarlo a ser más feliz cuando comienza la semana laboral. Estudios de la firma especializada Gallup muestran que tener un amigo en el trabajo es un fuerte indicador del compromiso del empleado con la compañía. Por ejemplo, según la consultora especializada en investigaciones, las mujeres que afirman tener una mejor amiga en el trabajo tienen muchas más probabilidades de comprometerse con el trabajo (63%) que aquellas que dicen lo contrario (29%). El último informe titulado "Estado del lugar de trabajo en Estados Unidos" concluye que solo dos de cada 10 empleados sostienen con fuerza que tienen un mejor amigo en el trabajo.
"Las relaciones sociales son el primer motor de la felicidad y las emociones positivas en el hogar y el trabajo. La primera cosa que diría una vez hecha la pregunta es: ¿Hay gente en el trabajo que realmente me gusta? ¿Cómo puedo lograr que haya más? Si no hay nadie, ¿cómo puedo encontrar personas que me gusten?", aconseja Eric Karpinski, asesor de felicidad de San Diego, California.
Ayude a alguien
Comience el día con un acto de caridad o amabilidad. Incluso algo tan pequeño como comprar el café para la siguiente persona en la fila o permitir que otro ocupe el lugar donde estaba a punto de estacionar puede darle buen tono al día. "Cuando hacemos algo bueno para otro, nuestro cerebro se beneficia de esos neurotransmisores y endorfinas positivos", dice Allen.
Trabaje con metas
Sea que fije una meta pequeña para tener un éxito al final del día o que dedique tiempo los lunes a avanzar hacia sus objetivos mayores, integrar factores de motivación en su día laboral puede ayudarlo a desarrollar sentimientos más positivos, concuerdan los expertos. "Luego, descubra cuál de esos puntos lo hacen sentir vivo. Imagine cómo integrarlos en el trabajo diario. ¿Cómo hacer más de las cosas que son su fuerte para tener más energía?", dice Karpinski. Eso lo ayudará a ser más feliz en el trabajo todos los días y recuperar su fe en los lunes.
Actualidad Laboral / Con información de La Nación