El personal de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) está en la absoluta desidia y , sobreviviendo con sueldos precarios. Todo resultado de una mala gerencia, según señalan Luis Canelones y Norma Torres, representantes del Sindicato Profesional de Electricistas y Conexos del estado Carabobo (Siprecec), quienes denuncian que la empresa intenta debilitar la fuerza sindical sumando trabajadores a cargos de confianza.
Los representantes de Siprecec denuncian que, la gerencia de Corpoelec ha hecho alianzas con pseudo dirigentes sindicales; como lo evidencian los recientes nombramientos de dos secretarios generales en puestos de gerencia, para debilitar el sindicalismo. Las designaciones de Abel Guzmán, secretario general de Siprecec, como jefe de División Estadal de Operación y Mantenimiento de Subestaciones y Línea Carabobo, adscrita a la Gerencia General Transmisión; y de Franklin Lucena, secretario general del sindicato de Puerto Cabello, como gerente de Distribución y Comercialización Carabobo, adscrita a la Gerencia General de Distribución y Comercialización; “vienen a dejar al descubierto” las verdaderas intenciones de la corporación, dice Canelones a El Estímulo.
“Corpoelec está totalmente politizada-partidizada. Así pues, quien no haga juego con ella resulta despedido, perseguido, amenazado, hostigado, tal como ha ocurrido con dirigentes que han luchado frente a un patrono que sin piedad mantiene a los trabajadores en miseria y hambruna”. Dice Canelones para informar que la semana pasada fue suspendido de sus labores, mientras que Torres y los dirigentes Julio Ávila, Juan González fueron despedidos.
Reclaman que “la empresa premia a quienes en sus acciones han entregado a los trabajadores, e incluso cometido delitos comprobables y denunciados, mientras que a los trabajadores honestos los persiguen”, dijo Canelones.
“En Corpoelec lo que reina es la desidia, la explotación, y ahora esta abominación de nombrar secretarios generales por demás incompetentes, a cargos de confianza; y sobre todo, supervisores de trabajadores, de los cuales no han sido defensores sino aliados patronales. Este es el juego de tratar de debilitar aún más el sindicalismo, a los trabajadores, sin embargo, el llamado es a mantenerse alertas, a no decaer y no dejarse amedrentar por la corrupción que implica otorgar cargos a dedo”, indicó.
Sueldos de miseria
Aseguran que la empresa se sostiene solo por los trabajadores pero, advierten que “el sentido de pertenencia ya no es suficiente, pues todos los que en esta empresa laboramos, pasamos a ser cuasi-indigentes”.
De los aproximadamente 45.000 trabajadores de la empresa han retirado 9.000, de acuerdo con cifra de la Federación Venezolana de Trabajadores Eléctricos (Fetraelec). Canelones afirma que que 85% de la nómina de la compañía estatal devenga salario mínimo, en momentos en que la inflación a noviembre se ubica en 1.389%, según la medición de la Asamblea Nacional.
En lugar de ocuparse de recuperar la compañía y dotar a los trabajadores de los implementos e indumentaria necesaria para realizar la labor diaria, la gestión de Luis Motta Domínguez, presidente de Corpoelec y ministro para la Energía Eléctrica, se ha caracterizado por perseguir y señalar a trabajadores por participar en supuestos actos de sabotaje. Canelones y Torres indicaron a El Estímulo que el único sabotaje está en la negligencia comprobada de sus autoridades, que son las únicas responsables del inminente colapso del Sistema Eléctrico Nacional.
Actualidad Laboral / Con información de El Estímulo
