08-02-2021

En una importante reforma de la economía local dominada por el Estado, Cuba permitirá a pequeñas empresas operar en la mayoría de las áreas, eliminando una lista de actividades que estaban limitadas, informaron medios estatales.


La medida ampliará el campo de 124 actividades para las empresas privadas a más de 2.000, dijo la ministra de Trabajo, Marta Elena Feitó, en una reunión del Consejo de Ministros que aprobó la nueva política.


Feitó dijo que habría algunas excepciones, aunque los reportes el fin de semana en medios locales proporcionaron pocos detalles.


Economistas cubanos defensores de las reformas han pedido durante mucho tiempo que la medida ayude a reactivar la frágil economía dominada por el Estado, creando empleos.


La economía del país se ha estancado durante años y junto a los efectos de la pandemia y las fuertes sanciones de Estados Unidos, han provocado una caída del 11% en 2020, además de la escasez de productos básicos y las interminables filas para obtener alimentos en puntos de ventas.


La crisis también ha forzado a tomar una serie de reformas prometidas desde hace tiempo pero estancadas, que van desde la devaluación del peso y la reorganización del sistema monetario, hasta cierta desregulación de empresas estatales y la inversión extranjera.


"Los trabajadores autónomos no lo van a tener fácil en este nuevo comienzo debido al complejo entorno en el que van a operar, con pocos dólares e insumos en la economía", señaló Pavel Vidal, execonomista del Banco Central de Cuba y profesor de la Universidad Javeriana de Cali, Colombia.


"Pero con el ingenio de los cubanos y la sofisticación del mercado paralelo, van a poder ir despegando poco a poco", dijo.


El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, dijo el año pasado que el país enfrentaba una crisis local e internacional en curso y que implementaría una serie de reformas para aumentar las exportaciones, reducir las importaciones y estimular la demanda interna.


Díaz-Canel afirmó que las medidas incluirían "la mejora del sector no estatal, con prioridad inmediata en la expansión del autoempleo y remoción de obstáculos".


El sector no estatal, excluida la agricultura, está integrado principalmente por pequeñas empresas privadas y cooperativas; sus empleados, artesanos, taxistas y comerciantes.


Todos están bajo la rúbrica de autónomos con un 40% estimado vinculado a la industria del turismo y el transporte público.


La Ministra de Trabajo informó que actualmente había más de 600.000 personas afiliadas al sector no estatal, lo que representa un 13% de la población activa.


Actualidad Laboral / Con información de AméricaEconomía