Alrededor de 150 casos de despido de trabajadores por razones políticas, en diferentes instancias del Gobierno venezolano, incluido el despacho del Presidente de la República, Nicolás Maduro, y la Vicepresidencia Ejecutiva, forman parte de la queja que envió la Unión Nacional de Trabajadores (Únete) a la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Son acciones ejercidas contra empleados y obreros, luego de las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre.

El coordinador de esta organización sindical, Servando Carbone explicó que esperan que estas denuncias sean consideradas en la próxima reunión del Consejo de Administración, a realizarse en marzo de 2016. “Ahora vamos con nuestra denuncia formal por la violación a la autonomía sindical y la violación a los derechos humanos”.

En esa reunión la representación de los trabajadores solicitará la activación una Comisión de Encuesta o de Investigación, con base en el artículo 24 de la OIT. Esto se sumaría a la acción ya admitida por esa instancia, promovida por Fedecámaras.

“El movimiento sindical no tiene nada que ver con la queja de Fedecámaras”, aclaró la coordinadora nacional de la Únete, Marcela Máspero. “Si nosotros introducimos una solicitud de comisión de encuesta, como íbamos a hacer en junio, esos dos expedientes se homologaban e iba a ser una sola queja, nosotros estamos planteando un tema que tiene que ver con los trabajadores”, advirtió.

De esta manera, en la OIT estarían evaluando las quejas de empleadores y trabajadores, relacionadas con libertad sindical y gremial, y discriminación política, entre otras.

Actualidad Laboral / Adriana Salazar Salas