El paro sigue bajando y acumula siete meses consecutivos de caídas. Si los datos de agosto fueron buenos, los de septiembre también. Dos meses tradicionalmente malos, en términos de desempleo, al verse penalizados por el final de la temporada de verano; pero que en esta ocasión, han dado resultados muy positivos. Los datos publicados este lunes 4 de octubre, muestran que en septiembre, el paro registrado descendió en 76.113 personas (un 2,28%) respecto al mes anterior; lo que supone la mayor caída de un mes de septiembre en la historia. Además, se encadenan siete meses consecutivos de descenso del paro, llegando de esta manera a una reducción de 750.000 desempleados desde el mes de marzo.
Siete meses consecutivos de reducción del desempleo
Desde el 2000, no se habían ligado siete meses consecutivos de reducción del paro. Y la rebaja actual es más del triple, que la que se produjo en aquella ocasión, hace dos décadas. Respecto a agosto, el desempleo retrocede en todos los sectores de actividad. Aunque, en términos cuantitativos, destaca su descenso en servicios, con 39.000 parados menos, seguido por la agricultura, la construcción y a más distancia, la industria. El turismo, el gran penalizado por la limitación de la movilidad, es también el sector que más ayuda a recuperar el empleo; sin embargo, el secretario de empleo Joaquín Pérez Rey, destaca que la recuperación es general y que por lo tanto, confía que en octubre, cuando los efectos del turismo en el empleo se reduzcan, “no llegaremos a dar un paso atrás”.
57.000 inscritos más a la Seguridad Social
En cuestión de género, en números cuantitativos, el paro se reduce más en mujeres (39.000 menos) que en hombres (36.000). Por otro lado, donde aumenta el desempleo es entre los jóvenes de menores de 25 años. Hay 5.800 más respecto a agosto, aunque desde la secretaría de Empleo matizan que es un fenómeno habitual en septiembre; cuando se incorporan al mercado laboral los recién licenciados, y añaden que el aumento es inferior al de otros años. En cualquier caso, los datos indican que actualmente hay 10.300 jóvenes menos, inscritos en las oficinas del SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal) que al inicio de la pandemia. Por otro lado, la Seguridad Social registró 57.837 trabajadores más en septiembre hasta sumar 19.351.111 afiliados en términos medios y sin ajuste estacional.
Es el mínimo histórico pero se ralentiza el ritmo de reducción
Si se aplica este ajuste estacional, supone un aumento de 82.184 trabajadores registrados, un 0,4% por encima del mes anterior. En términos desestacionalizados, el número de afiliados a la Seguridad Social se sitúa en 19.559.689 personas; con lo que se supera el número de ocupados en febrero de 2020, el mes previo al inicio de la crisis. Supone también el nivel de afiliación más alto registrado históricamente.
Respecto al número de trabajadores en ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) sigue el descenso y se sitúan en 239.230 los protegidos por estos expedientes de regulación. Es el nivel más bajo desde el inicio de la pandemia, aunque se nota la ralentización del ritmo de reducción del número de inscritos. Aquí destaca “la cicatriz de permanecer en ERTE tantos meses”, en palabras del secretario de estado de la Seguridad Social, Israel Arroyo. Se refiere a las empresas acogidas a los ERTE desde el inicio de la crisis, y por tanto, sin exoneraciones a la seguridad social; y que engloban a un tercio de los trabajadores acogidos a estos expedientes, un total de 87.000.
Son empresas muy pequeñas y mayoritiamente del sector del comercio. No tienen que ser empresas “zombies”, pero lo tienen más difícil. “Buena parte confían en volver a la actividad”, afirma Arroyo, y el secretario de estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey. Recuerda que un tercio del total de trabajadores en ERTE lo están a tiempo parcial, lo que indica que sigue la actividad en su empresa.
Actualidad Laboral / Con información de La Vanguardia