Según los registros del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la tasa de desocupación se ubicó en 3.5 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) durante mayo, y aunque no mostró ninguna variación respecto al mes anterior, en su comparación anual se observó un incremento de 0.3 por ciento.
Los niveles de desempleo son más evidentes en mujeres, ya que un 3.61 por ciento de las personas de este género no tienen trabajo, mientras que en el caso de los hombres, la cifra asciende a 3.38 por ciento respecto a la PEA.
Por su parte, la tasa de informalidad laboral representó el 56.37 por ciento de la población ocupada durante mayo, de esta forma, el indicador mostró una tendencia a la baja por tercer mes consecutivo, según registros del Inegi.
El reporte del quinto mes de año reveló que la informalidad disminuyó 0.62 por ciento a tasa anual con base en cifras ajustadas por estacionalidad.
A su vez, la cifra mensual de informalidad también fue inferior a la registrada durante el mes anterior, que se ubicó en 56.64 por ciento.
La informalidad contabiliza a aquellas personas que laboralmente son vulnerables por la naturaleza de la unidad económica para la que trabajan, ya que su vínculo o dependencia laboral no es reconocido por su fuente de trabajo.
Por otra parte, la tasa de subocupación, que es aquella que mide la cantidad de personas que declaró tener necesidad y disponibilidad de trabajar más horas representó el 7.51 por ciento de la población ocupada, cifra mayor al 7.4 por ciento reportado durante abril.
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