22-09-2022

La economía colombiana viene de varios meses con crecimientos muy positivos a raíz de la reactivación tras la pandemia. Incluso, durante el primer semestre del año, el producto interno bruto (PIB) todavía mostraba tasas de expansión importante, con un 10,6% para el acumulado a junio y de 8,6% y 12,6% para el primer y segundo trimestre respectivamente.


Sin embargo, ese impulso apoyado en gran medida por un efecto base que ayudó a ‘rebotar’ a las cifras podría estarse disipando, ya que según los expertos son varios los indicadores que muestran, de cara al segundo semestre de 2022, una menor tendencia de crecimiento.


Uno de los indicios lo muestra el Indicador de Seguimiento a la Economía (ISE) que mide el Dane, y que para julio creció 6,41% con relación al mismo mes del año 2021, la tasa más baja en lo que va del año.


Así mismo, otro indicador de seguimiento que muestra cómo la economía viene relajando sus tasas de crecimiento es el Weekly Tracker de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde), un indicador en tiempo real que utiliza datos de las tendencias de Google para medir la actividad económica.


Según este indicador, mientras que en los primeros meses del año se ubicó en cifras entre 5 puntos y 8 puntos, desde mediados de junio empezó a descender, en julio se situó alrededor de los 2 puntos y, en agosto, descendió hasta incluso 1,4 puntos de actividad, en la semana entre el 14 y el 20 de agosto.


Por otro lado, el indicador semanal ha mostrado para las dos primeras semanas de septiembre una leve recuperación, con cifras de 3,2 y 3,8 puntos, respectivamente.


Así mismo, datos sectoriales como la industria y el comercio vienen mostrando también señales de que las tasas altas de crecimiento están mermando.


El último deporte del Dane para la producción mensual manufacturera, referente a julio, evidenció un crecimiento anual de 5,2%, una tasa mucho más baja de las que reflejó la industria durante el primer semestre: enero (15,1%), febrero (10,7%), marzo (12,3%), abril (13,5%), mayo (42,6%) y junio (12,3%).


Una tendencia similar se refleja en las cifras del comercio minorista, que para julio crecieron 7,7%, muy por debajo del mes anterior, cuando reportaron un incremento de 17,2%.


Así mismo, el comercio al por menor también ha tenido otros datos dinámicos, como fue el crecimiento de 23,3% de abril, de 20,9% de enero, o de 34,8% en mayo.


Anwar Rodríguez Chehade, vicepresidente del centro de estudios económicos Anif, destacó que el primer semestre del año registró una tasa más alta de crecimiento si se le compara con el mismo periodo del año anterior (10,6% vs 9,0% en el 2021), “derivado de algunos efectos estadísticos de base que impulsaron la actividad económica este semestre”.


Entre estos, mencionó el experto, está por ejemplo el paro nacional del 2021, que redujo el dinamismo económico en gran parte del segundo trimestre, pues se afectaron las cadenas de suministro y se redujo la demanda de algunos bienes finales.


“Para la segunda mitad del 2022, ya no se contará con efectos de base, por lo que las tasas de crecimiento anuales convergerán de forma paulatina a las observabas antes de la emergencia sanitaria, en linea con lo que hemos previsto”, dijo Rodríguez.


Por otro lado, Mauricio Hernández, economista de BBVA Research para Colombia, reconoció que, a pesar de la desaceleración que ya se está dando en la economía, el crecimiento en el producto para 2022 será fuerte, aunque, según Hernández, tiene dos velocidades diferentes.


“Los registros que ya se publicaron al primer semestre reflejaron que la economía creció de forma sobresaliente hasta junio. Luego, aunque todavía en niveles positivos, la actividad económica tenderá a desacelerarse, tanto en lo concerniente a la demanda interna como en el rubro de las exportaciones”, dijo.


Según el economista de BBVA, esta desaceleración se mantendrá durante 2023, año en el cual el país tendrá unas tasas de crecimiento mucho más bajas, tanto por una menor demanda interna como por el menor impulso de la actividad global.


El último reporte Nowcast de Bancolombia, publicado a principios de mes, señala que en agosto “el crecimiento anual se consolidó en un dígito. Sin embargo, la actividad se aceleró secuencialmente, y las estimaciones para el tercer trimestre mejoraron”.


Según el análisis, entre junio y agosto la actividad productiva se expandió 7,9% anual, una moderación frente a lo registrado en el periodo anterior.


El reporte señaló que las cifras a corto plazo sugieren que el “aterrizaje de la economía colombiana está ocurriendo gradualmente”.


Actualidad Laboral / Con información de Portafolio