Si busca trabajo debe saber que por muchos portales de empleo que consulte o por más que revise las ofertas de trabajo que publican los grupos de Recursos Humanos o las propias empresas en su web; no verá más que una mínima parte de las vacantes; ya que el 75% no son visibles, según un estudio de Lee Hecht Harrison, división de Adecco.

¿Esto que significa? Pues que tres de cada cuatro ofertas de empleo en España se encuentran en el mercado oculto, es decir, las compañías prefieren no publicarlas y, por el contrario, las cubren acudiendo a sus propias fuentes de reclutamiento, bases de datos, intermediarios o por referencias de personas de confianza, esto es, el boca a boca de toda la vida. Y el porcentaje es aún mayor en el caso de las vacantes para puestos cualificados o especializados y, sobre todo, en perfiles de dirección y de alta dirección. Aquí, el 85% de las ofertas laborales no son visibles.

Según este estudio, con el inicio de la recuperación económica, este mercado oculto ha experimentado un cambio de tendencia y ha comenzado a reducirse, aunque de manera poco significativa aún. Si en 2014 abarcaba el 80% de las ofertas de empleo en España, tres años después, supone un 75%, esto es, ha caído cinco puntos porcentuales. El mercado laboral es como una especie de gran iceberg, del que sólo vemos una pequeña parte. A esta mínima porción se le denomina mercado abierto y es donde se encuentran las ofertas públicas o de fácil acceso; mientras que bajo la superficie se esconde otro mercado, mucho más extenso, donde se mueven las vacantes ocultas o de difícil acceso.

Ofertas que no son visibles para la mayoría, que tiene que conformarse con aquellas que se publican y que sólo representan el 25% de todas las vacantes laborales que hay en nuestro país. «Esta situación», aseguran desde Lee Hecht Harrison, «pone de manifiesto la dificultad añadida a la que se enfrentan los demandantes de empleo a la hora de buscar trabajo, y que pone de relieve que buscar trabajo es un trabajo en sí mismo que requiere una planificación y preparación para tener mayores probabilidades de éxito y reducir así el tiempo de recolocación».

A pesar de la relativa inestabilidad de este mercado oculto, el 63% de las personas que se recolocan lo consigue a través de esta vía, aunque existen importantes diferencias en las cifras por edad o sexo. Así, el perfil de los profesionales que mejor se mueven en este ámbito es el de trabajadores de entre 35 y 45 años (que suponen un 47% del total de recolocados), y más hombres (60%) que mujeres (40%).

Pero, ¿qué lleva a las empresas a ocultar algunas de sus vacantes? Uno de los principales motivos con los que justifican esta política es por una cuestión de confidencialidad. Pretenden evitar que la competencia conozca hacia dónde quieren encaminar su estrategia en función del puesto que demanden. En otras ocasiones, se prefiere recurrir a profesionales de los que se tiene referencia en lugar de a trabajadores desconocidos que, si bien pueden tener un buen currículum o una amplia experiencia, no se sabe cómo pueden actuar frente a situaciones límite. Además, en el caso de vacantes en puestos directivos, muchas empresas deciden buscar por sí mismas a los profesionales, identificando en el sector a la persona clave para esa posición que se pretende cubrir y dirigiéndose a ella directamente o a través de headhunters (cazatalentos).

Actualidad Laboral / Con información de El Mundo