En el Imperio Romano la sal era demasiado valiosa, tanto que la distribuían en paquetes llamados ‘salarium’ para pagarle a los funcionarios públicos y, justamente, de ahí el origen de la palabra salario. Por otro lado, el término emoción proviene del latín ‘emovere’, que traduce mover, trasladar o impresionar, y este mismo verbo es la raíz de palabras como movimiento, motivo o motor.
Al juntar ambas expresiones se forma uno de los conceptos más usados actualmente en el contexto laboral: ‘salario emocional’ que, en palabras de Patricia Moreno, gerente de Talento Humano de Compensar -organización destacada históricamente en los rankings de las mejores para trabajar en Colombia-, se constituye en el punto de encuentro entre los motivadores de cada colaborador con la oferta de la organización, su cultura y su entorno.
Específicamente, el término hace referencia a aquellos valores agregados tangibles o elementos intangibles del puesto de trabajo que repercuten en la calidad de vida del trabajador y que no se ven reflejados en la nómina, ya sean beneficios sociales, de formación, conciliación o flexibilidad, entre muchos otros. “El salario emocional no es algo rígido, cada persona valora y prioriza los elementos en función de sus necesidades y de su contexto”, agregó Moreno.
Además de los beneficios para los trabajadores, diferentes estudios han puesto sobre la mesa las bondades del salario emocional en las empresas, toda vez que contribuye a atraer y retener el mejor recurso humano, uno de los mayores retos que enfrentan hoy por hoy las compañías, en respuesta a la transformación de las prioridades de las personas.
Justamente, de acuerdo con una encuesta realizada por LinkedIn el año pasado, sobre las tendencias globales en selección, el 63 por ciento de los encuestados señaló que la conciliación, los beneficios y la flexibilidad son aspectos fundamentales a la hora de aceptar un trabajo, incluso por encima del salario económico, aspecto que tradicionalmente solía ser un factor prioritario.
Siguiendo con la gerente de Talento Humano de Compensar, “cuando hay un colaborador al que le han apostado en ese esfuerzo de desarrollarlo, de crecerlo, de contribuirle, hay una persona claramente motivada y conectada con la organización. Se genera un vínculo haciendo que se sienta más comprometida”, y por supuesto eso tiene una incidencia significativa en los niveles de productividad y eficiencia, tal y como lo reafirma el ‘State of the Global Workplace de Gallup’, al asegurar que un mayor compromiso de los trabajadores trae consigo un aumento del 21 por ciento en la rentabilidad y del 17 por ciento en la productividad.
El bienestar empieza por casa
En línea con su propósito de contribuir al bienestar integral de la clase trabajadora, filosofía que proyecta hacia afuera por medio del acompañamiento que brinda a sus empresas afiliadas y vive hacia adentro, Compensar ha venido fortaleciendo el programa de beneficios que disfrutan los cerca de 14.000 trabajadores vinculados a la entidad, consolidando alrededor de 30 acciones distribuidas en 5 líneas de acción: finanzas personales, cuidado de la familia, salud física y mental, tiempo y flexibilidad, y desarrollo personal y profesional.
“Tenemos varias alternativas y una oferta que desarrollamos a nivel de beneficios para que nuestros colaboradores, según sus necesidades y expectativas, elijan cuáles tienen más sentido para ellos o cuáles pueden disfrutar mucho más, y, de acuerdo con esa elección, crear su propia propuesta de bienestar”, puntualizó Patricia Moreno.
Entre las acciones desarrolladas por la entidad para promover el bienestar de sus colaboradores y familias, se destacan actividades de bienestar físico a través de sus gimnasios, además de su programa de salud emocional y un auxilio económico de entre el 35 por ciento y el 50 por ciento en el Plan Complementario de Salud, con el que impacta cada año a cerca de 7.000 colaboradores y sus familias.
Entre los beneficios de trabajar en la entidad se encuentran también dos jornadas para compartir en familia, una cada semestre del año, así como hasta tres días adicionales de vacaciones y dos días más en las licencias de luto. Por otra parte, en materia de finanzas personales, se destaca un auxilio para aumentar sus ahorros en el Fondo Mutuo de Inversión, así como préstamos y auxilios educativos. Adicionalmente, programas de formación permanente a través de su universidad corporativa.
Cómo retener el talento humano por medio del salario emocional
La gerente de Talento Humano de Compensar, especialista en transformación organizacional, innovación y desarrollo humano, destaca tres aspectos clave en la tarea de promover la felicidad y el bienestar integral de los trabajadores.
El primero es conocer los motivadores del colaborador, y para ello son útiles las encuestas, los grupos focales, los balances sociales y demás instrumentos que recojan los datos sobre condiciones sociodemográficas, índice de rotación, indicadores de reclutamiento y similares. “Es fundamental tener datos para mostrar cómo está tu gente y su realidad, para con esos ‘insights’ articular una oferta de valor que responda a sus necesidades”, explicó.
El segundo es desarrollar un modelo de bienestar integral adaptado a la organización; un portafolio de acciones y beneficios que, una vez implementado, se supervise y se fortalezca continuamente para así incrementar el impacto sobre los trabajadores y sobre la empresa. Y finalmente, es clave contar con aliados estratégicos que faciliten el desarrollo de las estrategias de bienestar.
“La vida personal y la vida laboral se continuarán mezclando, haciendo difícil identificar dónde termina una para iniciar la otra, por eso debemos esforzarnos por conocer y entender a nuestros equipos, con sus preocupaciones y deseos, no solo a nivel profesional sino también en el ámbito personal para llegar a ellos con opciones adicionales que contribuyan a su bienestar integral”, concluyó Patricia Moreno, gerente de Talento Humano de Compensar.
Actualidad Laboral / Con información de Portafolio