Hacer frente a la desigualdad se salarios entre hombres y mujeres que realizan el mismo trabajo, es lo que pretende un decreto que empezará a regir en Massachusetts, Estados Unidos en 2018. Esta norma impedirá que los empleadores pregunten a los aspirantes a un puesto de trabajo cuánto ganaban en sus empleos anteriores.

La idea de esta nueva ley, que ha sido promulgada por el gobernador, del Estado de Massachusetts, Charlie Baker, es cortar con una trayectoria de salarios que tradicionalmente han sido más bajos para las mujeres, tomando en cuenta que en los empleadores tienden a establecer los salarios de sus nuevos trabajadores considerando el que percibían en sus empleos anteriores.

Este decreto también impide que las empresas prohiban a sus trabajadores hablar o compartir información acerca de su sueldo. Se considera que la transparencia en cuanto a este aspecto deja en evidencia las disparidades en los distintos niveles profesionales.

Con información de El País y La Nación