Como un “sistema de amedrentamiento” calificó el presidente de Fedecámaras, Jorge Roig, las acciones ejercidas por el Gobierno Nacional contra dos cadenas de distribución y almacenaje de alimentos y medicinas, en los últimos días. El dirigente empresarial expresó que los representantes del sector productivo del país temen que se amplíen las medidas a otros rubros de la economía.

“Esto ha creado mucho miedo en la comunidad empresarial y es una represión que, evidentemente, se está incrementando cada día, que restringe más libertades, aleja las inversiones, destruye la confianza”, advirtió. Y agregó que los gerentes de las grandes cadenas temen ir a sus lugares de trabajo por la “nueva arremetida que ha habido contra el sector empresarial”.

A juicio de Roig, este tipo de medidas de ocupación temporal sobre los establecimientos comerciales, “lejos de ser parte de la solución, va a ir agravando el problema que tenemos de escasez”. Informó además que se estaría obligando a los empresarios a firmar un acuerdo que es “prácticamente un reconocimiento de que ha habido prácticas desleales, reñidas con la ética por parte del empresariado”.

Sin embargo, durante el Consejo Nacional de Fedecámaras, realizado este martes, en Caracas, acordaron solicitar una reunión el comisionado presidencial para el tema económico, el empresario Miguel Pérez Abad, quien también es presidente de Fedeindustria. Hasta ahora no hay fecha, se iniciaron los primeros contactos para definir la agenda.

Caso “Farmatodo” y “Día a Día”

Según información que maneja el presidente de Fedecámaras, hasta este miércoles, en horas del mediodía, permanecían retenidos en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), el presidente ejecutivo de Farmatodo y un gerente, rindiendo declaraciones. Reiteró su opinión sobre esta empresa “tiene 96 años aquí, apostando con sensibilidad social, con sus trabajadores, con las comunidades y difícilmente puede creerse que el pueblo venezolano está detrás de una conspiración”.

En cuanto a la directiva de “Día a Día”, explicó que no se ha podido comunicar con los representantes de la empresa, o con sus socios pero dijo tener buenas referencias de la misión de esa compañía “Es una cadena de unos jóvenes emprendedores que tuvieron un sueño, lo convirtieron en realidad y hoy lo ven truncado, y prácticamente sometidos al escarnio público”. Recordó que esta iniciativa fue reconocida por la Universidad de Harvard.

Sobre ambos casos, criticó que hasta el momento, no han podido presentar públicamente su versión de los hechos, más allá del comunicado que divulgó la cadena de farmacias. “Se sataniza al sector empresarial, prácticamente se juzga antes de haber tomado alguna prueba concluyente”.

Así mismo, Roig informó que presentarán la denuncia respectiva ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en caso de que los afectados hagan la solicitud, y formaría parte del expediente que se lleva en Ginebra, sobre los ataques a la actividad privada en el país.

Actualidad Laboral / Adriana Salazar Salas