Según Marketingdirecto.com, a la hora de escribir un CV se cometen errores sin darnos cuenta. Por este motivo, el site describe lo que no se debe hacer.

Usar palabras grandilocuentes. Todos queremos parecer con dotes comunicativas y un vocabulario rico. Pero a veces, este no es el mejor método para demostrar la inteligencia pues, produce el efecto contrario e incluso en un intento por quedar bien utilizamos de forma errónea las palabras poniéndonos en evidencia.

Descripciones demasiado largas sobre la experiencia previa. No es necesario nombrar cada una de las tareas desempeñadas en anteriores puestos de trabajo. De hecho, el entrevistador agradecerá que ofrezca solamente los puntos más relevantes que añaden valor a su postulación y le hacen válido para el puesto que solicita. Resuma, enumere, cuantifique y simplifique. Lo bueno si breve, dos veces bueno.

Largas listas de trabajos anteriores. Limítese a nombrar los tres puestos más recientes y relevantes para la candidatura a la que aplica. No tiene importancia su trabajo en verano o alguna suplencia sin impacto.

Enumerar habilidades tecnológicas que todo el mundo tiene. Quizá en los inicios de la tecnología, cuando los ordenadores eran unas máquinas complejas y extrañas y las máquinas de escribir estaban a la orden del día, hubiese sido relevante destacar su dominio de Microsoft Office. Pero actualmente es mejor que se decante por mostrar ciertas capacidades que le distinguen del resto de candidatos.

Hobbies. Lo cierto es que este punto es algo polémico. Hay quien opta por incluir por ejemplo trabajos como voluntario que pueden transmitir ciertos valores importantes para las empresas hoy en día. Sin embargo, otros como presumir de ser coleccionista de cromos no tiene cabida en una entrevista de trabajo. De todas formas, ante la duda, elimínelo.

Actualidad Laboral / Con información de El Mundo