Casi cuatro de cada diez empresas españolas elevan su nivel de rotación laboral, sobre todo las de hostelería, mientras que solo el 6,5% los ha reducido debido, mayoritariamente, a la “internalización” de la plantilla tras la entrada en vigor de la reforma laboral (42,7%), la mayor flexibilidad (23,5%) o la mejora del clima laboral (19,9%), según un estudio de Randstad entre 4.800 empresas de todos los sectores de actividad recogido por Europa Press.
El grupo de recursos humanos señala en este estudio que el aumento de la rotación laboral entre casi cuatro de cada diez empresas se debe al cambio de patrón que ha tenido lugar tras la pandemia.
Así, entre las causas que provocan el aumento de la rotación destaca sobre el resto el mayor número de oportunidades laborables que existen en otras empresas para los trabajadores (77,2%), seguida por el riesgo de trabajar en determinado sector a raíz de la pandemia y de los cierres forzados (31%).
En menor medida se encuentra la imposibilidad de atender las demandas de los trabajadores por parte de los empleadores, tanto las salariales (24,1%) como las enfocadas a mejorar las condiciones de flexibilidad como el teletrabajo (23,3%).
Aún teniendo en cuenta estos datos, Randstad subraya que más de la mitad de las empresas (el 55%) ha mantenido a lo largo del último año unos niveles de rotación “aproximadamente estables” debido, principalmente, a la ausencia de cambios en las condiciones laborales dentro de la empresa, pero también en las de la competencia.
Según Randstad, la rotación media anual de las empresas españolas se situó en el 17% en 2022, aunque esta cifra varía mucho dependiendo de la región, con una horquilla que supera ampliamente los diez puntos entre las comunidades autónomas con mayor y menor nivel de rotación.
Estas diferencias entre regiones responden, según el estudio, a factores sectoriales y otros vinculados al diferente dinamismo de los flujos de empleo. Los mayores niveles de rotación laboral se dan en Andalucía (23,7%), Navarra (23,2%) y Murcia (22,7%).
A continuación se sitúan Castilla-La Mancha (21,1%), Baleares (20,3%), Galicia (18,8%), Castilla y León (18,7%), Cantabria (18,4%), Extremadura (18%) y La Rioja (17,8%).
Con tasas inferiores al 17% de la media nacional aparecen Cataluña (16%), Madrid (15,6%), Asturias (15,2%) y Aragón (14,3%), mientras que las tasas más bajas de rotación laboral corresponden a Canarias (13,6%), Comunidad Valenciana (11,7%) y País Vasco (9,1%).
Dos de cada tres empresas de hostelería aumentan las rotaciones
El informe pone de manifiesto que la rotación laboral no está evolucionando de manera homogénea por sectores, pues existen “grandes disparidades” entre ellos, dependiendo, entre otros factores, de su nivel de exposición a la crisis económica y laboral generada por la pandemia.
Así, en el caso de la hostelería, uno de los sectores más afectados por la crisis del Covid, casi dos de cada tres empresas (el 63,7%) han visto incrementada su rotación laboral en el último año.
En el otro extremo figuran actividades que, o bien se han convertido en sector de acogida para profesionales procedentes de sectores más afectados, como la construcción, o bien han destacado como sectores atractivos durante los últimos años, como el caso del sector de la información y las comunicaciones. En ambos casos, menos del 30% de las empresas de ambos sectores han visto crecer la rotación en el último año.
Cerca de estos dos sectores se encuentra el comercio, en el que sólo un 31,2% de las empresas ha visto aumentar la rotación laboral durante los últimos doce meses, según Randstad.
Dentro del ‘top 15’ de actividades económicas con mayor rotación laboral, el informe incluye a la industria del cuero y calzado; la confección de prendas de vestir; la industria de la madera; la industria alimentaria y la fabricación de bebidas; servicios de comidas y bebidas; servicios de alojamiento; transporte marítimo; otros servicios personales; juegos de azar, y publicidad y estudios de mercado.
En el otro extremo, con las menores tasas de rotación laboral, figuran actividades ecomómicas como la metalurgia; la fabricación de otro material de transporte; la industria farmacéutica; la fabricación de equipo eléctrico; la I+D; telecomunicaciones; actividades mineras; educación, y seguros, entre otras.
En relación con las expectativas de las empresas sobre cómo evolucionará la rotación laboral en el próximo año, una cuarta parte de ellas (25,1%) espera que sus niveles de rotación crezcan, mientras que solo un 8,7% espera descensos.
“La tendencia general se inclina hacia crecimientos en la cifra global de rotación en el próximo año“, apunta Randstad. No obstante, casi dos tercios de las empresas (66,2%) creen que sus actuales niveles de rotación se mantendrán relativamente estables en los próximos doce meses.
Actualidad Laboral / Con información de Capital