10-02-2022

El Gobierno español cerró un acuerdo con los sindicatos para la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) de los actuales 965 euros a los 1.000 euros. No ha habido sorpresas en la reunión de esta semana, después de que la patronal ya anunciara que no pensaba apoyar este incremento del 3,6% del suelo salarial y certifica su separación por segundo año consecutivo de la revisión del SMI.


Y las centrales, que abogaban por llegar a los 1.000 euros, vieron satisfechas sus demandas con la primera propuesta del Ministerio de Trabajo, que ya fue de 1.000 euros. No ha habido triple entendimiento en el diálogo social en esta ocasión y el Gobierno cierra el periodo de consultas para llevar el incremento al Consejo de Ministros o bien del próximo martes o bien el del 22 de febrero.


Este aumento será con efecto retroactivo a 1 de enero del 2022 y beneficiará a 1,8 millones de trabajadores, alrededor del 10% de la población asalariada en España. "Es un hito muy importante para nuestro país, [...] dejamos atrás la España de los bajos salarios", ha afirmado la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, tras la firma del acuerdo.


La relación entre el Gobierno, más concretamente la vicepresidenta segunda, y los empresarios se mueve entre una de cal y otra de arena. Tras conseguir atraer a los patronos a un acuerdo para la reforma laboral -en el que la CEOE entró para minimizar daños-, un mes después los de Antonio Garamendi plantan a la líder de Unidas Podemos en el Gobierno para subir el salario mínimo.


"Parece responder más a una aspiración política en el seno del Gobierno que a la lógica económica", le reprocharon desde la CEOE. Los patronos se han enrocado en no aceptar -de momento- más subidas, tras acumular desde que Pedro Sánchez llegó a la Moncloa, en el 2018, un incremento del 36% en el SMI. Desde que llegó el socialista a la presidencia del Gobierno este indicador ha pasado de los 735,9 euros a los más recientes 1.000 euros.


El desmarque de los empresarios ha provocado que no haya quedado atado el incremento del SMI para el 2023. Aquí el compromiso del Gobierno es claro y pretende llegar al equivalente del 60% del salario medio en España. Lo que, según los cálculos del comité asesor del Ejecutivo, sitúa potencialmente este suelo salarial el año que viene en una cifra cercana a los 1.050 euros. Trabajo ofreció moderar esta subida a cambio de que los empresarios aceptaran acercarse a los 1.000 euros este año, pero los patronos rechazaron entrar en el acuerdo.


1,8 millones de trabajadores se verán beneficiados por la subida de este suelo salarial, que le costará a sus empleadores 600 euros anuales en concepto de salarios y cotizaciones sociales. Según un análisis publicado por CCOO, el incremento del SMI a 1.000 euros implicará que este suelo salarial atrapará a unos 300.000 trabajadores en toda España.


Pues si en 2021 los cálculos eran que 1,5 millones de trabajadores cobraban el SMI, ahora dicha cifra asciende a 1,8 millones. En este sentido, el sueldo mínimo está atrapando a los eslabones más débiles de los convenios. En 2018 sindicatos y patronales ya acordaron que no podía firmarse ningún nuevo convenio con categorías por debajo de los 1.000 euros brutos (en 14 pagas), por más que en algunos sectores las centrales denunciaron fuertes resistencias para aplicar dicho compromiso.


Los sindicatos han defendido que los incrementos acumulados en los últimos años del SMI no han destruido empleo, apoyándose en que, a nivel macro, España ha mantenido ritmos continuados de crecimiento -con excepción del primer mazazo del covid-.


Actualidad Laboral / Con información de El Periódico