La falta de corresponsabilidad en las tareas domésticas y familiares sigue lastrando el desarrollo profesional de las mujeres en España. El 47% de las mujeres encuestadas indican que ser madres ha modificado su trayectoria y situación laboral, mientras sólo el 8% de los padres ha tomado decisiones similares. Esta es una de las conclusiones del informe ‘Observatorio de la Mujer Profesional en España’ que ha elaborado EAE Business School.
El estudio, que recoge las respuestas de más de 800 mujeres de entre 20 y 60 años con estudios universitarios y residentes en Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Bilbao y Zaragoza, subraya que la percepción de desigualdad laboral se produce en todos los grupos de mujeres, independientemente de su edad, formación académica o lugar de residencia. Esto evidencia que las barreras a las que se enfrentan son un problema profundamente arraigado en la sociedad española.
El informe de EAE revela que el 84% de las mujeres percibe una mayor presión social hacia ellas en la crianza, mucho más allá de los primeros meses en los que existe una necesidad biológica. Según el 49% de las encuestadas, esta desigualdad radica en que los hombres no han sido educados para ser cuidadores y carecen de herramientas necesarias para gestionar la emocionalidad y la logística que requiere la crianza.
Además, el 42% de las encuestadas señala que es la mujer quien lidera la crianza, mientras que un 38% teme ser considerada como una "mala madre" si no asume este rol. Esta sensación de culpa es especialmente alta entre las mujeres más jóvenes, con un 44% reconociendo que les afecta de manera significativa.
Las raíces de la desigualdad
El ‘Observatorio de la Mujer Profesional en España’ pone en evidencia que la desigualdad también tiene un trasfondo económico. Una de cada cuatro mujeres (26%) afirma que asume el papel de cuidadora principal porque el padre aporta más ingresos al hogar. “Situación generada justamente porque la madre absorbe la mayoría de la carga lo cual la somete a una mayor precariedad salarial y a largo plazo a una pobreza femenina endémica.” asegura Carina Mellit, directora del SRC (Strategic Research Center) de EAE Business School, y una de las autoras del estudio.
La investigadora resalta que “es crucial desafiar las creencias limitantes en las que fuimos educadas y las expectativas que se han puesto en nosotras para llevar adelante el cambio hacia una sociedad más igualitaria. Aunque hemos avanzado mucho en los últimos años, la culpa y la percepción de que el cuidado es un rol que nos pertenece por biología de género dificultan el camino hacia una verdadera corresponsabilidad”.
Emprender para conciliar
El informe de EAE también revela que el emprendimiento se alza como una solución para lograr la conciliación, ya que 3 de cada 4 mujeres (59%) indicó que consideró emprender para tener mayor flexibilidad y mejores horarios. La realidad confirma que es así, ya que aquellas que lo hicieron (74%), lograron esta mayor flexibilidad e incluso libertad económica (59%).
Además, el estudio constata que las políticas de conciliación de las empresas y organizaciones son clave para impulsar el desarrollo profesional de la mujer y su ascenso laboral. En este sentido, al preguntar sobre los factores que facilitarían el ascenso a posiciones directivas, las mujeres destacan medidas de recursos humanos como la flexibilidad horaria (34%), las políticas públicas de conciliación aplicables a ambos progenitores, el liderazgo conciliador o las estructuras empresariales horizontales, ambas señaladas por el 29%
Ascenso laboral femenino
El estudio también expone que el 64% de las mujeres atribuye las mayores oportunidades de ascenso de los hombres a la menor carga familiar que asumen. Esto, junto con una brecha de género institucionalizada (manifestada por el 62%) y la falta de referentes femeninos en la dirección de las empresas (47%), dificulta la progresión profesional de las mujeres.
Con estos datos, el Observatorio de la Mujer Profesional en España de EAE Business School no solo expone las desigualdades, sino que subraya la urgencia de implementar cambios en las empresas, en las políticas públicas y en la mentalidad colectiva para avanzar hacia una sociedad más igualitaria.
Actualidad Laboral / Con información de Equipos y Talento