08-01-2020



Los dos principales sindicatos del sector tecnológico y del mundo de los videojuegos en Norteamérica han comenzado las negociaciones para fusionarse en uno solo y así fortalecer los derechos de los trabajadores que operan en las principales empresas del sector. La nueva campaña, nacida bajo el nombre de Campaign to Organize Digital Employees (CODE), busca unificar los sindicatos Communication Workers of America (CWA) y Game Workers Unite (GWU), bajo un mismo marco.


El nuevo sindicato, que no ha querido desvelar cuánto dinero ha recibido para convertirse en un único ente al periódico LA Times, sí ha confirmado que contará con una nueva organización y una serie de objetivos más claros y concisos de cara a defender a los empleados que trabajan en el sector tecnológico y el de los videojuegos. Entre las nuevas caras visibles de este movimiento por los derechos laborales en Norteamérica, se encuentra una de las fundadoras de Game Workers Unite, Emma Kinema.


kinema

"Creemos que los trabajadores son más fuertes cuando están juntos bajo el amparo de un único sindicato, por lo que las disciplinas existentes en el campo tecnológico no pueden enfrentarse entre sí, nada de eso es bueno para los trabajadores", explicaba la propia Kinema al citado periódico. "Creo que en los juegos y la tecnología, el modelo industrial unificado es la mejor opción", añade. De hecho, el nuevo organismo nace con una serie de desafíos asomando por el horizonte. La industria tecnológica y del videojuego, en constante expansión y crecimiento, ha sido implacable con los trabajadores y profesionales dentro de ella. En los últimos años, los desarrolladores de videojuegos han comentado y hecho públicas sus duras condiciones, con horarios sin regular, cargas de trabajo enormes y prácticas de explotación conocidas como crunch para finalizar los juegos que deben llegar puntuales al mercado.


En los últimos años hemos asistido a problemas y casos muy mediáticos, como el vivido en Telltale Games, con condiciones laborales deplorables que llevaron al estudio responsable de The Walking Dead a cerrar y reestructurarse por sus prácticas abusivas. También fue sonado el despido de más de 800 empleados de Activision Blizzard a comienzos de 2019 debido a una reestructuración de la empresa. Tras el lanzamiento de Red Dead Redemption 2, los empleados y profesionales de Rockstar se quejaron y denunciaron jornadas laborales de más de 100 horas, y en Riot Games, creadores del exitoso League of Legends, se denunciaron casos de acoso y explotación y humillación por género.


Actualidad Laboral / Con información de Vandal