PwC, una de las cuatro firmas de consultoría de las ‘Big Four’, permitirá a 40.000 de sus empleados estadounidenses teletrabajar desde cualquier parte del país. Pero al aceptar la propuesta, el salario de esos trabajadores se verá reducido si se trasladan a lugares con menor costo de vida. La pandemia de la Covid-19 ha sido la causante de la propuesta más radical por parte de alguna empresa del grupo.
A los empleados que trabajan de cara al cliente, se les han dado dos semanas para optar por roles "virtuales", trabajando desde casa; excepto cuando, ocasionalmente, se les necesite en una oficina para reuniones, visitas de clientes u otros eventos clave. Los trabajadores que se decanten por trabajar a distancia, tendrían que acudir a la oficina no más de tres días al mes, según la propia PwC.
“Pagamos a nuestra gente en función de dónde viven", ha dicho al Financial Times, Yolanda Seals-Coffield, líder de PwC en Estados Unidos. "Ganarás lo mismo que los demás empleados similares que trabajen en tu misma localización, sea o no virtualmente", ha continuado.
Empresa pionera en el teletrabajo en Estados Unidos
PwC es la primera empresa de servicios profesionales en Estados Unidos, que permitirá a los empleados trabajar a distancia desde cualquier parte del país. Es probable que esta decisión, de que trabajen principalmente desde casa; a largo plazo obligue a los competidores, incluidos sus tres grandes rivales Deloitte, EY y KPMG, a considerar la posibilidad de hacer lo mismo para retener al personal. Empresas como Facebook, Twitter o Google ya utilizan el método de rebajar el salario de sus trabajadores, que se muden a ubicaciones más baratas.
Su empresa hermana del Reino Unido, PwC UK, está en desacuerdo con el enfoque de la empresa norteamericana. La empresa de Reino Unido, gestionada por separado, ha sido una firme defensora de las oficinas y ha dicho al personal, que pasarán un promedio de dos a tres días en la oficina después de la pandemia.
Si el plan falla, volverán al trabajo presencial
PwC ha dejado la puerta abierta para revertir la política, si el trabajo a distancia permanente no es un éxito. "Si bien estos no son movimientos a corto plazo, y están destinados a ser opciones continuas para nuestra gente. Vamos a seguir evaluando e innovando como lo hacemos con todas nuestras políticas, beneficios y flexibilidad", ha finalizado Seals-Coffield.
Actualidad Laboral / Con información de Nius