Probablemente si le preguntas a gente como Elon Musk, te digan que la inteligencia artificial no tardará demasiado en sustituir a la mayoría de trabajadores. Una percepción con la que no todo el mundo está de acuerdo. Algunos expertos en tecnología, incluso, aseguran que la IA no es tan inteligente después de todo, y que quizá las expectativas puestas en ella resultan excesivas.
Así las cosas, en ocasiones es complicado saber en qué punto se encuentra la transición laboral, si es que realmente existe, relacionada con la IA. Sin embargo, algunos estudios pretenden esclarecer el asunto, como sucede con una nueva investigación, según la cual hay una serie de profesiones que ya mismo podrían ser sustituidas por máquinas, o directamente ya lo están siendo.
¿Es realmente una amenaza la IA para el trabajo?
Según artistas como Stephen King o Steven Spielberg, la inteligencia artificial no supone un peligro en sus distintas tareas profesionales (en este caso, escribir o hacer cine). La razón que dan para argumentar su tranquilidad es sencilla: la falta de creatividad e ingenio que demuestran, al menos a día de hoy, herramientas tan populares como ChatGPT.
Algunos estudios, de hecho, parecen dar la razón a este razonamiento, y han mantenido que la IA no es más inteligente que un gato doméstico. Sin embargo, otros estudios señalan en la dirección contraria. Es lo que ha sucedido con un trabajo recientemente publicado por el medio Indeed, y que ha valorado los riesgos que pueden tener un total de 2.800 profesiones diferentes.
Su conclusión al respecto parece tranquilizadora por lo general. Según esta, solamente un 28,5% de las tareas que los empleados llevan a cabo en estos momentos podrían verdaderamente ser reemplazadas por ChatGPT y similares. Básicamente por tratarse de labores relativamente reiterativas, y en las que la IA incluso podría evitar errores que a día de hoy se cometen. Serían las siguientes:
¿Cómo competir profesionalmente con la inteligencia artificial?
De la misma forma, el estudio citado analiza otros puntos interesantes, y en muchos casos no tiene más remedio que dar la razón a lo que Stephen King o Steven Spielberg han supuesto. Al parecer, la mejor manera de competir, a corto y medio plazo, con la inteligencia artificial no es otra que potenciar aquellos puntos en los que esta tecnología flojea: la creatividad y los sistemas complejos.
Lo que sí parece seguro, de una forma o de otra, es que la IA puede terminar por volverse muy común a la hora de desarrollar muchas tareas. Lo cual no querría decir necesariamente que sustituyese a los humanos, sino que más bien exigiría una convivencia mutua. Algo similar a lo que hoy pasa con los ordenadores: no hacen el trabajo solos, pero son necesarios para muchísimas cosas.
Con todo, ni siquiera los expertos parecen ponerse de acuerdo en el impacto auténtico que la inteligencia artificial tendrá de aquí a unos años. Y de hecho, ni siquiera faltan quienes ya le están denunciando hoy en día.
Actualidad Laboral / Con información de Business Insider
