Las mujeres están aumentando su participación en la riqueza mundial. Es una tendencia que viene produciéndose en los últimos años en Europa y Estados Unidos, y de forma más acelerada en Asia. el proceso parece imparable. En lo que va de siglo la riqueza acumulada en manos de mujeres ha crecido en términos absolutos, y, en algunos aspectos, también en términos relativos con respecto a la de los hombres. Los datos más recientes revelan que el número de mujeres de éxito que escalan los puestos más altos en riqueza es cada vez mayor, aunque en su conjunto siguen en desventaja en cuanto a las oportunidades para crearla, según se publica en el último informe anual Global Wealth Report que elabora el Research Institute, de la entidad financiera Credit Suisse.
El estudio, que se ha enfrentado a la difícil tarea de desbrozar registros en los que es frecuente que los patrimonios familiares no estén a nombre de una persona física, y de tener en cuenta las diferencias patrimoniales que pueden resultar de un divorcio; estima que las mujeres concentran aproximadamente el 40% de la riqueza mundial. “Su parte en la riqueza global aumentó considerablemente durante el siglo XX, y ha seguido subiendo, junto con el de los patrimonios familiares. Sin embargo, no está claro que su participación entre las grandes fortunas haya continuado ganando posiciones en este siglo. De otro lado, hay alguna evidencia de que la representación de las mujeres ricas –sobre todo las hechas a sí mismas– ha estado subiendo en los últimos 5-10 años al top de los multimillonarios”. Además –subraya el informe–, “la proporción femenina ha crecido en Asia por la expansión de China, que cuenta con la mayor presencia [de mujeres] relativa en la región”.
Europeas y estadounidenses
El estudio revela que durante el período 1996-2013, las mujeres de Francia, Alemania, España y Reino Unido ostentaron el 43% de la riqueza. En Italia, la esposa es propietaria del 40% de la vivienda conyugal. En otros países apenas hay datos, como en Suecia donde se registró un importante crecimiento de mujeres en el exclusivo grupo de las grandes fortunas durante 1979 y 1992, pero después, su estudio cayó en el olvido. Los autores que han participado en el trabajo de Credit Suisse llegan a la conclusión de que, “la participación de las mujeres en la riqueza tanto en Europa como en América del Norte se encuentra, probablemente, en un rango entre el 40% y el 45%. Esta cifra es un fuerte indicio de la proporción de mujeres en el mundo: Europa y América del Norte albergan solo al 17% de los adultos del mundo, pero juntas representan el 61% de la riqueza mundial”.
En el resto del mundo, datos recientes indican que en África e India la proporción de mujeres oscila entre el 20% y el 30%. Otro caso diferente es China, cuya economía lleva nutriendo en los últimos años las listas mundiales de grandes fortunas. En el capítulo femenino, clasificaciones de Bloomberg, Forbes y Hurun, señalan que las mujeres están bien representadas entre el numeroso colectivo de multimillonarios de China. Incluso, la reputada firma de análisis china Hurun afirma que dos tercios de las mujeres multimillonarias que se hacen a sí mismas en el mundo son chinas.
Por otro lado, la región de Asia-Pacífico (excluyendo China e India) es muy heterogénea. Contiene países donde la situación de riqueza de las mujeres es similar a la de India (por ejemplo, Pakistán y Bangladesh), pero otros países son más similares a China. Según los expertos de Credit Suisse, en la región el porcentaje de mujeres muy ricas estaría entre el 25% y el 35%. En Latinoamérica, los estudios en algunos países de la zona muestran que existe una pequeña brecha de género en la concentración de riqueza, pero, para la región en su conjunto, la proporción de mujeres es inferior a la de Europa y América del Norte. Credit Suisse la estima en el mismo rango del 30 y el 40% que en China.
Fuerzas opuestas
“La combinación de estas cifras sitúa la participación de las mujeres en la riqueza global en el rango del 35% al 42%, o el 40% en números redondos. Es superior al de otros estudios anteriores, debido a nuestra inclusión de activos no financieros, que constituyen la mitad de la riqueza de las familias y se comparten de manera más equitativa entre mujeres y hombres que los activos financieros”, precisa Credit Suisse.
Los expertos del Global Wealth Report destacan que en los países más avanzados ha sido donde la mujer, ha logrado más avance social y lo que le ha permitido escalar en la pirámide de la riqueza. Mejor educación, desarrollo de carreras profesionales, independencia económica, acceso más tardío al matrimonio y la maternidad son algunos de los rasgos sociales que definen la vida de la mujer actual y que han dominado el debate político, en buena parte de la segunda mitad del siglo pasado.
Sin embargo, también advierten que a pesar de los avances, hay algunas ‘fuerzas opuestas’, sobre todo en la situación patrimonial después de un divorcio y la discriminación salarial que practican muchas empresas. Otra de las ‘fuerzas opuestas’ que señalan los autores del informe sería la supuesta aversión al riesgo que se da más entre las mujeres que entre los hombres.
Actualidad Laboral / Con información de Forbes España