En el mundial de fútbol Rusia 2018, Luis Felipe Gómez, exempleado de Avianca, fue grabado tomando alcohol en el estadio Mordovia Arena. El video se viralizó luego de que Gómez y sus acompañantes supuestamente ingresaran de manera clandestina el licor. Luis Felipe fue rápidamente identificado en el video y sin explicaciones por parte de la empresa, no sólo perdió su empleo, sino que recibió sanciones por parte de la Cancillería. Todo esto no fue notificado oficialmente, por lo que supo de estas decisiones por redes sociales.
Aunque Gómez aclaró en una entrevista a RCN Radio que no fue él quien ingresó el licor, admitió que su error había sido aceptar un trago de uno de los acompañantes que sí estaba tomando. Esta versión no fue escuchada por Avianca, por lo que interpuso una tutela a la empresa. En la entrevista radial, Gómez aclaró que su intención con la tutela no fue la reintegración, sino que su versión fuese escuchada por la empresa y no se siguiera tergiversando su comportamiento por el video que circulaba en redes sociales.
La acción legal resolvió amparar los derechos fundamentales de Gómez, y el fallo a su favor restituyó por la vía legal el derecho a la dignidad, el buen nombre, la honra, la presunción de inocencia y el trabajo que desempeñaba en Avianca. La tutela exige la rectificación del tweet en el que Avianca informó sobre el despido del empleado. Además, ordena rectificar el comunicado enviado a los empleados con los motivos de su despido. Se alega que su versión sea redactada en un acta para el expediente laboral de Gómez.
Aunque la compañía impugnó el veredicto, un fallo de segunda instancia favoreció de nuevo al tutelante. Además, el juzgado envió copias del proceso a la Fiscalía para que se empezara una investigación contra Gerardo Grajales, directivo de Avianca Cargo y Avianca Holding por presunta calumnia. La tutela ampara la rectificación de información por parte de Grajales, así también la información entregada a El Espectador que mencionaba el contrabando.
En su declaración a la emisora, Gómez afirmó que su imagen quedó “por el piso”, y que Avianca cumplió con el acuerdo de rectificar la información que se dio a El Espectador. Esta rectificación fue publicada el tres de diciembre en la cual el señor Grajales dijo que “la persona a la que se hace referencia en aquella publicación (Luis Felipe Gómez) no incurrió en la conducta del contrabando”.
Actualidad Laboral / Con información de El Espectador
