Ser despedido puede ser devastador, pero no es el final de tu carrera. Sin embargo, la forma en que menciones ese despido en una entrevista de trabajo es importante: no debes mentir, pero tampoco debes extenderte mucho sobre ello. “No debes hacer del despido una carga que tenga que asumir un gerente de reclutamiento”, dice Roy Cohen, asesor de carrera y autor de 'The Wall Street Professional's Survival Guide'. Aquí cuatro tips para que abordes la situación y logres salir ileso:
El primer paso para dejar atrás un despido es aceptarlo. Hacer un balance de la situación y comprender por qué sucedió, te ayudará a explicarlo mejor en una entrevista laboral. ¿Fue un problema de rendimiento? ¿Un conflicto de personalidad? ¿Nueva gestión? ¿O fue una reducción de personal que no pudo evitarse?
“No debes definirte a ti mismo por un error o un revés. No es algo que defina tu carrera”, menciona John Roccia, un especialista en carrera de la firma de orientación profesional Ama La Vida.
2- Prepárate para que surja el tema
Aunque no deberías ser tú quien lo mencione, debes estar preparado para que el entrevistador te pregunte por qué ya no estás en tu trabajo anterior. La clave es tener confianza en tu respuesta: mantén una buena postura y contacto visual, cuida tu tono y no te pongas nervioso ni te sientas incómodo.
“No es solo lo que dices, sino cómo lo dices”, asegura Barry Drexler, un asesor de entrevistas. “Tan pronto como empiezas a divagar y te pones nervioso, le das vida al asunto y atraes la atención hacia él”.
3- Mantente positivo
Incluso si todavía tienes malos sentimientos acerca del despido, mantente positivo y haz que la discusión se enfoque hacia el futuro. “No deberías ser el primero en promocionar algo negativo”, explica Roccia. “Deberías estar avanzando hacia algo”.
Trata de evitar el uso de palabras como despedido o corrido, ya que pueden sonar duras. En cambio, Cohen recomienda usar palabras y frases como: separado, una reducción involuntaria de la fuerza laboral, mi puesto fue eliminado. “Todos son eufemismos de 'me despidieron' pero suenan más suaves y amables”, comenta.
Hablar mal y culpar a tu antiguo jefe solo te hace quedar mal. “Ellos están tratando de manejar su cultura laboral. Si das la impresión de que causarás discusiones desde el principio, esa no es una buena señal”, dice Roccia.
4- Sé breve pero honesto
Debes mantener tu respuesta breve y concisa, pero también objetiva. “Si surge el tema, cuéntales lo que sucedió a un alto nivel”, indica Wanda Kiser, presidente y CEO de Elite Resume WritingServices. “Explica lo que aprendiste de la experiencia y luego vuelve al tema, y habla sobre el valor que podrías ofrecer en función de tus competencias, de lo que indica la descripción de la vacante y qué te convierte en un gran candidato. Ofrece algunos logros medibles”.
Si el entrevistador sigue presionando para obtener más información sobre la situación, mantente en el aspecto positivo. Si el despido estuvo relacionado con problemas de rendimiento, Cohen sugiere decir que siempre has tenido un alto desempeño, pero que te viste envuelto en una situación en la que no tenías las herramientas adecuadas.
Luego, tómate el tiempo para explicar lo que has hecho para rectificar cualquier brecha de habilidades y que has continuado tu entrenamiento, para mostrar que aprendiste del pasado. También podrías mencionar que el puesto no era el adecuado y que tu desempeño, no estaba al nivel necesario porque no te apasionaba el trabajo, recomienda Roccia. “Luego, di que decidiste que solo enfocarías tu búsqueda laboral en compañías que realmente te apasionen. Eso demuestra que has aprendido y asumido la responsabilidad”.
5- Usa un empleo corto a tu favor
Si estuviste en un trabajo durante menos de un año , podrías ser un poco más franco sobre la situación. “Di: 'Cuando entré, fue una gran oportunidad, pero resultó no ser el lugar adecuado para mí, así que me estoy alejando de ello' ”, indica Drexler.
Actualidad Laboral / Con información de Expansión by CNN