El Gobierno francés anunció este miércoles que subvencionará diez días de vacaciones pagadas, a todos los trabajadores de los sectores más afectados por la pandemia de COVID-19, como bares, restaurantes, discotecas o gimnasios. La ayuda está destinada a los trabajadores de aquellas empresas que han visto su actividad interrumpida, de forma parcial o total al menos 140 días a lo largo de 2020; o que en ese periodo, han visto reducir sus ingresos más de un 90% durante los periodos de confinamiento, indicó el Ministerio de Trabajo en un comunicado.
"Estos baremos permitirán optar a la ayuda a cafés y restaurantes. Pero también a los hoteles, que no estaban obligados a cerrar pero que, a causa de la falta de clientes por las restricciones de desplazamientos, también se han visto obligados al cierre", agregó. Las vacaciones pagadas deberán ser tomadas, de forma necesaria, entre el 1 y el 20 de enero próximo, periodo en el que Francia no tiene previsto reabrir este tipo de establecimientos.
La ministra francesa de Trabajo, Elisabeth Borne, que se reunió con las asociaciones empresariales de estos sectores, consideró que esta medida beneficiará "a los más afectados por la crisis" y viene a completar otras ayudas ya anunciadas con anterioridad. El responsable de Pequeñas y Medianas Empresas del Ejecutivo, Alain Griset, señaló que esta iniciativa es otra muestra del "apoyo masivo del Gobierno, a las empresas más golpeadas por la situación sanitaria". Y señaló que, si fuera necesario, se tomarán otras adaptadas a la evolución de la pandemia.
Actualidad Laboral / Con información de 20minutos.es