Desde el gobierno de Nicaragua se emitieron claras advertencias hacia sectores empresariales que se sumen al paro convocado por la oposición de ese país para exigir la libertad de los presos políticos y el respeto a los derechos humanos.
El primero en declarar fue el titular del Ministerio de Hacienda y Crédito Público (MHCP), Iván Acosta, quien dirigió su advertencia a la banca local. "Cualquier llamado o cualquier decisión empresarial de esos grupos van a tener sus sanciones necesariamente porque están regulados por la ley", dijo Acosta, en un mensaje emitido a través de medios del Gobierno.
La reacción de Acosta se dio luego de que diversas cámaras empresariales demostraron su apoyo al llamado de un paro nacional contra Ortega, convocado por la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, en medio de la peor crisis sociopolítica de Nicaragua en décadas.Acosta afirmó que "la actividad bancaria tiene una gran responsabilidad con el sector público, tiene un servicio público de apertura obligatoria, no puede haber ningún banco en tiempos normales que pueda cerrar al público".
"No se puede cerrar de un día a otro y no se debe cerrar, eso lleva a sanciones de parte de la reguladora del sistema financiero", advirtió el ministro de Hacienda.
El Ministerio del Trabajo (Mitrab) también advirtió a los empresarios y empleadores sobre sanciones en caso de que algún empleador cometa errores en el tratamiento que haga de la ausencia de un trabajador.
"En el caso de que algún empleador o empresa suspenda labores por cualquier causa o motivo, esto no afecta ningún derecho laboral (...) lo dispuesto en esta comunicación da paso a los procedimientos y sanciones establecidas en la legislación laboral", señaló el Mitrab.
La advertencia del Mitrab significa que, si los empleadores suspenden labores, deberán pagar el día a sus trabajadores o acordar con estos que el día se les descontará de sus vacaciones.
Las advertencias del Gobierno, que incluyeron la activación de alertas verde y amarilla por lluvias, no mermaron las muestras públicas de apoyo al paro nacional por parte de las empresas nicaragüenses.
La crisis sociopolítica que vive Nicaragua ha causado un fuerte impacto en la economía local. Según el Banco Central de Nicaragua en 2018 el producto interno bruto retrocedió un 3,8 por ciento, a causa de la crisis, y no se esperan números positivos para 2019.
Al menos 325 personas han muerto en Nicaragua en el marco de la crisis, según datos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Organismos cuentan hasta 593, mientras el Gobierno reconoce 199.
Actualidad Laboral / Con información de Estrategia y Negocios