Si estás decidido a darle un cambio radical a tu vida, empieza por estos sencillos hábitos. Acabamos de empezar el año, así que todavía estás a tiempo de convertir 2020 en el año que cambió tu vida.


Lee


A partir de ahora, lee más libros de forma regular. Para alcanzar este objetivo, es de vital importancia que desvíes la mirada más a menudo de la pantalla a las páginas impresas. Es sorprendente la cantidad de tiempo que pasamos mirando los dispositivos móviles y viendo la tele. Solemos pasar alrededor de tres horas mirando pantallas. Esta relación entre los libros y las pantallas tiene que cambiar desde ya.


La lectura ayuda a pensar y a escribir de forma más clara y creativa y te proporciona una visión más amplia del mundo.


Existe una diferencia cualitativa entre leer algo impreso y algo online. Resulta más fácil concentrarse cuando se lee en un libro. Las investigaciones demuestran que es menos probable perder la atención cuando leemos algo impreso. En una encuesta realizada en 2016 a estudiantes universitarios, el 67% de los encuestados dijo que era mucho más probable que se distrajeran si leían algo en una pantalla, en comparación con el 41% cuando leían en papel.


Escucha


Empieza la década con la determinación de prestar más atención a lo que te están diciendo. Para ello, será necesario abordar las conversaciones con curiosidad y paciencia.


Stephen Covey lo dijo mejor: "Intenta primero entender, luego ser entendido". Al adoptar la intención de entender primero, te convertirás en un oyente más eficaz y evitarás malentendidos o llegar a conclusiones erróneas. Una postura más receptiva llevará a una experiencia más comprometida tanto para ti como para la persona con la que estás hablando - y os ayudará a ambos a encontrar soluciones más beneficiosas para los problemas.


Encuentra tiempo para reflexionar


reflexionar

Descartes dijo: "Pienso, luego existo". Hoy en día, no pensamos lo suficiente - lo que impide que lleguemos tan lejos como podríamos. Dan Cathy, presidente de Chick-fil-A, reserva medio día cada dos semanas y un día completo al mes para realizar lo que él llama pensamiento intencional. Esto le permite concentrarse en sus proyectos más importantes.


Todos tenemos tiempo para reflexionar, sin embargo, solemos dedicarlo a navegar con nuestros dispositivos móviles. Intenta desviar más de este tiempo hacia el pensamiento enfocado e ininterrumpido. Todos los días hay oportunidades para la reflexión, y debes aprovecharlas. Para empezar, da más paseos, incluso cortos, sin sucumbir a la tentación de mirar el teléfono móvil. Estos son precisamente los momentos en los que se nos suelen ocurrir las mejores ideas.


Es posible que mientras lees esto estés pensando que de verdad que no tienes tiempo para reflexionar. Por supuesto que lo tienes. Hay muchas formas de encontrar tiempo para pensar sin perder el tiempo. Mientras paseas al perro. Esperando el tren. Corriendo o haciendo ejercicio en el gimnasio.


Déjate de excusas y empieza a adoptar estos sencillos hábitos para cambiar tu vida a mejor.


Actualidad Laboral / Con información de Ihdol