11-05-2022
Los precios al consumo se ralentizaron levemente en abril en Estados Unidos, al situarse en 8,3% en relación al mismo mes de 2021; informó este miércoles (11.05.2022) el gobierno. La inflación se había ubicado en 8,5% en los 12 meses previos en marzo, pero se desaceleró el mes pasado; en medio de una caída en los costos de la energía, informó el Departamento de Trabajo.

El primer freno en la escalada de precios es una buena señal para la economía estadounidense, aunque habrá que esperar a los próximos meses, para confirmar si la tendencia se mantiene. Si se excluyen los precios de alimentos y combustibles, que son los más volátiles, la inflación subyacente fue del 6,2% en tasa interanual.

La gasolina cayó 6,1% en abril con respecto a marzo. No obstante, pese a esa disminución, los costos de la energía aumentaron 30,3% en los últimos 12 meses; y el costo de la gasolina es 43,6% más elevado que hace un año. Los precios continuaron su aumento para una variedad de rubros, incluidos vivienda, alimentos, tarifas aéreas y vehículos nuevos, y la inflación se mantiene en su mayor nivel desde 1982.



El precio de los alimentos subió un 10,8% en los últimos 12 meses, lo que constituye el mayor aumento anual desde noviembre de 1980, de acuerdo con el informe. Las carnes de res, ave, pescado junto con los huevos subieron 14,3%, el mayor nivel desde mayo de 1979. Asimismo, los productos lácteos y cereales registraron importantes subas en abril, aunque bajaron los precios de las frutas y verduras.

La subida de los precios se ha convertido en el principal quebradero de cabeza para el presidente estadounidense, Joe Biden; quien este martes, un día antes de publicarse la tasa de abril, afirmó que la inflación es su "máxima prioridad doméstica". Biden sigue culpando al presidente ruso, Vladímir Putin, y su decisión de invadir Ucrania, de la elevada inflación en Estados Unidos.

Actualidad Laboral / Con información de DW