La población estadounidense avanza en su proceso de envejecimiento y salida del mercado laboral, y la única forma de enfrentar el problema socio-económico es con los inmigrantes, advirtió el investigador del Centro de Estudios en Movilidad Humana y Conflictos, William Mejía.

"Diga lo que diga Donald Trump, Estados Unidos sigue necesitando a los inmigrantes. Estados Unidos avanza en su proceso de envejecimiento poblacional", sostuvo el investigador en entrevista con Notimex.

El problema de envejecimiento de la población en Estados Unidos, es una realidad, quizá no tan aguda como lo es para países como Alemania o Canadá. "Es una necesidad absoluta, la llegada de inmigrantes a Estados Unidos", enfatizó Mejía.

Los inmigrantes dan respuesta - argumentó - a las necesidades de fuerza laboral que requiere el mercado en Estados Unidos, y a la vez, se convierten en cotizantes importantes para sostener el sistema de seguridad social, y por ende a los jubilados que están en ascenso.

En Estados Unidos aumentan las personas que están por encima de los 60 años que "van saliendo del mercado laboral, que se van pensionando. Si Estados Unidos no tiene quien cotice, el sistema llega a una crisis".

La explosión demográfica de Estados Unidos, "desde la post guerra, está saliendo del mercado laboral. Los últimos de la generación del 45 (siglo pasado), ya están saliendo del mercado laboral".

La realidad en la actualidad en Estados Unidos es que los mayores aportantes al sistema de pensiones son los inmigrantes o "las poblaciones que se consideran no blancas: hispanos, asiáticos, negros e incluso los propios afroamericanos".

En su opinión, en el gobierno de Estados Unidos se están moviendo dos discursos: uno político y populista "que vende y que llevó a Trump a la presidencia y el otro es el económico por que Estados Unidos no puede vivir sin inmigrantes".

En Estados Unidos tienen claro la importancia en términos económicos de los inmigrantes, así en la Casa Blanca, lo ignoren y lo que puede ocurrir es que Trump le deje un grave problema de seguridad social a los futuros gobiernos.

Recordó que las 97 multinacionales más importantes en Estados Unidos que son vanguardia de la economía de ese país norteamericano, advirtieron que el 30 por ciento su población laboral son inmigrantes.

Mejía en este escenario se preguntó: "¿Quién va construir el muro que propone Trump en la frontera con México? ¿Quién va recoger las cosechas? No serán los gringos, serán los inmigrantes".

En cuanto a la propuesta del muro, Mejía aseguro que es una medida que "no resuelve nada. Si se cierra una puerta el inmigrante da la vuelta y busca la forma de cruzar. El problema se tornará más costoso en términos humanitarios".

"El número de muertos y detenidos en el trayecto se incrementará, pero no va frenar. En los últimos años el número de inmigrantes mexicanos se estaba reduciendo, pero aumentaban los centroamericanos, y esto seguirá ocurriendo", enfatizó.

Por el lado de Suramérica, Mejía cree que el endurecimiento de las medidas migratorias de Trump, puede generar que se miren otros destinos en la región como son Chile, Argentina y Brasil, países que avanzan en leyes migratorias, en las que se da prioridad a la defensa de los derechos humanos.

"El panorama para los inmigrantes en Estados Unidos, es muy complicado, pero lo que es una realidad es que inmigrantes seguirán llegando a Estados Unidos. Será menos atractivo ir, pero es un fenómeno que se mantendrá", concluyó el investigador.

Actualidad Laboral / Con información de Terra