El idioma es importante para todo nuevo inmigrante, en particular, para aquellos quienes desean ingresar al mercado laboral. Comunicarse en el idioma local puede ayudarlo en cada etapa del proceso: ampliar su red de contactos profesionales, llamar la atención de posibles empleadores y conseguir una entrevista de trabajo.
El hecho de aprovechar sus competencias lingüísticas actuales va a “aumentar de forma significativa sus perspectivas de empleo”, dice Emilie Nketiah, orientadora profesional y de transición laboral de la Escuela de Educación Continua de la Universidad McGill. “La inversión vale la pena”.
La ciudad está llena de nuevos inmigrantes exitosos que han seguido ese consejo. A continuación, dos de sus relatos personales:
Carina Lucen vino a Canadá desde Perú, donde había estudiado inglés y francés. Cuando llegó a Montreal, tomó cursos de francés durante dos meses y después empezó a estudiar Finanzas en francés. Ahora trabaja en un banco en el distrito de Saint-Leonard, en Montreal, donde interactúa con sus clientes “en inglés, francés, español e italiano”. Su objetivo es convertirse en asesor financiero, así que ha estado activa en el mercado laboral, pero aún no se siente segura de sus competencias lingüísticas en inglés, en particular, durante las entrevistas de trabajo. “Estudié inglés por tres años y me desenvolvía bien”, dice Carina. “Solo tengo que practicar para refrescar mi memoria”.
En vez de tomar cursos de inglés tradicionales, Carina buscó orientación profesional en la red y descubrió los talleres que ofrece McGill sobre el mercado laboral (Labour Market Workshops). “Estos me ayudan a mejorar mi inglés y, al mismo tiempo, a avanzar en mi carrera. La confianza en mí misma ya ha aumentado y mis aptitudes para las entrevistas se han fortalecido”.
“Hay una seguridad que deriva del hecho de comunicarse en los idiomas locales”, dice Emilie. “Aunque solo posea competencias lingüísticas básicas, el hecho de mostrar que está dispuesto a aprender lo ayudará a integrarse a la cultura”.
Alejandro Soto emigró de Venezuela. Cuando llegó a Montreal, hablaba inglés y francés, y tenía experiencia como ingeniero en telecomunicaciones. Practicó su francés y empezó a estudiar Telecomunicaciones en ese idioma. “Después de dos semestres, me estaba yendo bien, así que pensé que podría estudiar y trabajar al mismo tiempo”, comentó. “Y aunque mis competencias lingüísticas no eran perfectas, estas eran lo suficientemente buenas para encontrar trabajo en un centro de llamadas, mientras buscaba trabajo como ingeniero”. Su novia se había inscrito previamente en los talleres sobre el mercado laboral que ofrece McGill y le recomendó que asistiera.
El plan de Alejandro fue un éxito: recientemente aceptó un puesto en una empresa de telecomunicaciones en Montreal. “Es exactamente el mismo puesto que ejercía en Venezuela, pero aquí”. En la oficina de Alejandro se trabaja más que todo en francés, pero también se emplea el inglés. “En Venezuela, trabajé con personas y empresas de todo el mundo, y a menudo nos comunicábamos en inglés”. Aunque dice que su transición profesional requirió paciencia, “mi consejo sería que si usted pudo desempeñar su cargo antes, también lo puede hacer aquí”.
La cultura y el idioma propios de Montreal suponen que “no faltan recursos a su disposición”, dice Emilie. “Existen sesiones para practicar la conversación, así como clases diseñadas específicamente para escribir. Los cursos de idiomas se imparten a tiempo completo, tiempo parcial y en línea. Hay tantas opciones que resulta imposible no encontrar alguna que se adapte a sus necesidades”.
El factor que tanto Carina como Alejandro enfatizan a la hora de hablar un idioma es la confianza en uno mismo. “Pienso que a menudo las personas saben más de lo que creen”, dice Alejandro. “Sea positivo y esté preparado”.
Actualidad Laboral / Con información de Noticias Montreal