31-03-2017
Autoridades en varios países, desde Holanda a Australia, lanzaron redadas e investigaciones contra docenas de personas sospechosas de evasión fiscal a través de un banco suizo no identificado.

Un gran banco suizo, Credit Suisse, emitió un breve comunicado el viernes indicando que las autoridades locales habían visitado sus oficinas en Ámsterdam, París y Londres por cuestiones fiscales de sus clientes no especificadas. Sin embargo, ni el banco ni las autoridades relacionaron los dos incidentes en sus comunicados.

La hacienda holandesa sospecha que se ocultaron a las autoridades fondos por valor de varios millones de euros, según un comunicado. Hay investigaciones relacionadas en Gran Bretaña, Australia, Alemania y Francia, añadió el fisco holandés.

Dos personas fueron detenidas en los registros del jueves, y se confiscaron un lingote de oro, autos de lujo, docenas de cuadros, propiedades inmobiliarias, joyas y cuentas bancarias, así como datos de miles de titulares de cuentas.

En las próximas semanas se lanzarán más acciones, señalaron las autoridades holandesas.

Por su parte, Credit Suisse sólo dijo que sus oficinas en Londres, París y Ámsterdam habían recibido "visitas" de las autoridades locales en relación con cuestiones fiscales de sus clientes no especificadas. La entidad recalcó su "estrategia de pleno cumplimiento fiscal de clientes" y mencionó un programa de intercambio automático de información con los países europeos que comenzará en abril.

La portavoz de Credit Suisse Anna Sexton declinó hacer más comentarios.

Los bancos suizos han sido desde hace tiempo el blanco de esfuerzos internacionales para perseguir la evasión fiscal. Suiza cambió su legislación de secreto bancario para ciudadanos extranjeros tras una operación liderada por Estados Unidos para perseguir a evasores fiscales que descubrió una trama a gran escala de evasión fiscal con la colaboración de bancos suizos.

La Financial Action Task Force, con sede en París, dijo en diciembre que Suiza había obtenido "buenos resultados" en la lucha contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo, aunque pidió que el país reforzara sus controles, aumentara su vigilancia sobre el empleo de efectivo y compartiera información con autoridades extranjeras.

En su comunicado, las autoridades holandesas afirmaron que "el fraude puede socavar el sistema tributario" y la evasión fiscal "afecta a la sociedad". La tecnología actual, el aumento de la cooperación internacional y el levantamiento del secreto bancario han hecho más fácil para las autoridades encontrar a los evasores fiscales y a su dinero, añadió el comunicado.

La cooperación internacional, señalaron, es importante en este caso en particular y en las investigaciones de fraude fiscal en general porque los evasores fiscal se llevan su dinero a otros países.

En la operación se confiscaron datos de miles de titulares de cuentas, señalaron las autoridades holandesas, que informaron de redadas en La Haya, Hoofddorp, Zwolle y Venlo. EL gobierno holandés trabaja en la investigación con la agencia europea de justicia, Eurojust.

Eurojust declinó hacer comentarios.

Las autoridades británicas, por su parte, dijeron haber abierto una pesquisa penal sobre supuesta evasión fiscal "por parte de una institución financiera global y ciertos de sus empleados". Al igual que las autoridades holandesas, la hacienda británica no identificó a la institución.

La primera fase de la investigación, que incluirá más operaciones en las próximas semanas, se centra en empleados de alto nivel de la compañía y una serie de clientes, indicó la agencia británica en un comunicado.

"El esfuerzo internacional en esta investigación envía un mensaje claro de que no hay un lugar donde ocultarse para los que quieren evadir impuestos", afirmó la agencia.

En Australia, las autoridades dijeron estar investigando a 346 australianos con lazos con gerentes de banca suiza que supuestamente habrían "promocionado y facilitado tramas de evasión fiscal".

La investigación reveló que los australianos identificados tenían cuentas numeradas en un banco suizo, señaló Kelly O'Dwyer, ministra australiana de Ingresos y Servicios Financieros.

"El hecho de que estas cuentas fueran anónimas implica que por su misma naturaleza es probable que se abrieran para ocultar la identidad del propietario", indicó O'Dwyer en un comunicado.

Actualidad Laboral / Con información de AP