Los trabajos independientes y la famosa "gig economy" están transformando el mercado laboral, a través de startups que revolucionan sectores concretos.
Uber o Airbnb son dos de las compañías que por su popularidad, ayudan a la "economía de los trabajos por encargo" o "por proyecto" a afianzarse. Pero no son, ni mucho menos, los únicos casos.
Mientras Airbnb es uno de los ejemplos más claros de como estos cambios generan empleo poco tradicional, la startup estadounidense HubHaus, otra de las webs para encontrar alojamiento, levantó recientemente una ronda de financiación de u$s1,4 millones.
Ahora bien, HubHaus no es otra plataforma más para hacer dinero alquilando una habitación a viajeros esporádicos. En realidad, esta startup pone su granito en la transformación que produce la "gig economy" del mercado laboral ofreciendo la oportunidad de alquilar una habitación al llegar a una nueva ciudad y, además, encajar en gustos y cultura con el resto de compañeros de la casa.
Asimismo, la startup Common se asentó en distintos puntos de Estados Unidos y logró hacerse con más de 20 millones de euros de financiación provenientes de distintos inversores.
No obstante, no solo de movilidad (Uber, BlaBlaCar...) o alquiler de habitaciones vive la "gig economy". Ésta y el empleo tienen una vinculación mucho más directa a través de las startups que permiten poner en contacto a profesionales y posibles clientes.
Otra de las pioneras en el sector de la economía colaborativa que se afianza con el paso de los años es TaskRabbit: nacida en San Francisco en 2008, esta startup estadounidense recaudó a lo largo de sus casi diez años de vida unos u$s40 millones de financiación en distintas rondas.
¿Cuál es su secreto? En realidad, su éxito se basa en lo mismo que otras plataformas que han demostrado que la "gig economy" puede cambiar el mercado laboral: pone en contacto a profesionales de un sector con potenciales clientes que necesitan de sus servicios.
Además, las startups que revolucionan ya el mundo del empleo desde la economía digital son punteras en innovación. Es el caso de OnboardIQ, que desde 2015 facilitó más de 400.000 contrataciones por horas en Estados Unidos y que recientemente levantó una ronda de financiación de más de u$s9 millones.
Su objetivo es permitir que las empresas que necesitan de un gran número de empleados por horas puedan automatizar el proceso de selección y contratación. Así, con la inteligencia artificial por bandera, la economía colaborativa se afianza como motor de innovación en el mercado laboral.
No solo en Estados Unidos hay compañías que aprendieron los secretos de las nuevas modalidades de empleo. En España, la plataforma de búsqueda de trabajo CornerJob, registra más de 100.000 contrataciones y sus rondas de financiación son un éxito. Hace un año cerró una ronda de más de 20 millones de euros, este año consiguió levantar otra de más de 15 millones. En total, desde su creación, esta startup recaudó más de 50 millones de euros de financiación.
Otras empresas centradas en nichos concretos dentro del amplio mercado laboral ya están probando suerte dentro de la "gig economy" desde España. Wayook es una de ellos. A poco de arrancar en 2014, superó los 15.000 usuarios registrados y cerró una ronda de financiación de más de medio millón de euros. La plataforma permite algo tan sencillo como poner en contacto a usuarios con profesionales de la limpieza del hogar presentes ya en más de 100 ciudades.
Algo aún más original propone la startup sevillana Beetripper, que ofrece a los viajeros una ruta alternativa a la que pueden encontrar de la mano de los clásicos guías turísticos: la que permite conocer cualquier urbe de la mano de un ciudadano de ese lugar.
Este proyecto también se plantea desde la "gig economy" para cambiar el mercado laboral ya que, básicamente, pone en contacto a viajeros con ciudadanos dispuestos a pasar parte de su tiempo con el turista para ofrecer una visión particular de la ciudad y, además, ganarse un sobresueldo.
Con un enfoque más general nació en 2012 la también española Etece. De hecho, el amplio abanico de profesionales que ofrecen sus servicios a través de esta plataforma ya le sirvió en su primer año de vida para levantar dos rondas de financiación distintas por un total de un millón de euros. Montadores de muebles de Ikea, plomeros, tapiceros, costureras e incluso contadores son algunos de los profesionales se pueden encontrar en ella.
Ya sea a uno u otro lado del océano Atlántico, lo cierto es que la "gig economy" ha hecho mella en el mercado laboral. Y este solo parece ser el principio.
Si bien las plataformas más expertas cuentan ya con una década de vida, mientras la economía colaborativa se afianza, su relación con el empleo se hace más y más cercana.
Actualidad Laboral / Con información de IProfesional