Que los influencers son el ojito derecho de los consumidores y, en consecuencia de las marcas, no es ningún secreto a estas alturas; pero, en el popularizado mundo de la influencia social, todavía son muchas las marcas que caminan a ciegas. Y es que, que las colaboraciones con las estrellas digitales den buenos resultados, no quiere decir que estén exentas de retos. Encontrar el equilibrio entre crear una unión natural y sólida, que beneficie a ambas partes, se puede convertir en ocasiones, en un verdadero infierno.
Hacer encajar todas las piezas en un puzle con una complejidad creciente, es el mayor reto de las marcas en un mercado que, cambia a una velocidad vertiginosa. Pero, la dificultad es todavía mayor, cuando se trata de dar a conocer un nuevo producto en un saturado escenario digital.
Apostar por influencers para aumentar la visibilidad de un lanzamiento puede ser una estrategia acertada, pero ¿cómo utilizarlos para aprovechar al máximo su liderazgo entre los consumidores? “A la hora de introducir un nuevo producto es crítico causar un fuerte primer impacto”, cuenta Shane Barker, Digital Strategist, Brand & Influencer Consultant en TNW. En este sentido, marcar la diferencia dependerá de la unicidad del contenido que se ofrezca a los consumidores.
No hay nadie que conozca mejor a su audiencia que los influencers. Por lo que, dejarles libertad creativa para que busquen la manera más adecuada de ofrecer entretenimiento y visibilidad al producto, será clave para dejar una huella duradera en la memoria de los consumidores.
Otra manera de generar ruido y mantener el interés durante más tiempo, es organizando concursos y regalos a través de las redes sociales. Aprovechar el interés que generan los influencers y combinarlo con estrategias que premien, por ejemplo, a los primeros usuarios en participar, es una buena manera de aumentar la visibilidad del lanzamiento.
La credibilidad es uno de los aspectos más perseguidos por las marcas y, las estrellas digitales se convierten en poderosísimos vehículos de comunicación, capaces de incrementar la confianza del público hacia las marcas que recomiendan.
Para crear expectación sobre el nuevo producto, puede resultar beneficioso ofrecer al influencer un acercamiento previo, a modo de “unboxing”, en el que se muestren a la audiencia las características y primeras impresiones sobre la novedad.
Claro que, cuando se trata de influir sobre la decisión de compra de la audiencia, no todo vale. De hecho, asegura Barker, “utilizar al influencer correcto para promocionar el nuevo producto puede marcar la diferencia en el lanzamiento”, ya sea a través de un simple tweet en el que muestren su emoción o una acción mayor. “El éxito dependerá del influencer con el que se elija trabajar”.
Finalmente, cabe recordar que, aunque las marcas utilicen a los influencers como medio para hacer llegar su mensaje, dictar las reglas de una manera unidireccional puede llegar a ser contraproducente. El miedo a que se pierda la esencia de lo que se quiere comunicar y se desvirtúe el mensaje, hace que muchas compañías caigan en una tiranía a la que prácticamente ningún influencer quiere someterse. En su lugar, será mejor optar por ofrecerle toda la información posible sobre la campaña, la idea y el fin último de la acción. Además, incluirle en el proceso de creación, diseñando, por ejemplo, el packaging de un producto o invitándoles a la grabación del spot. Esto le ofrecerá incentivos para que el vínculo entre marca e influencer vaya más allá de lo económico.
Actualidad Laboral / Con información de Marketing Directo