La desigualdad de género es una realidad en el mundo. Muchos estudios han medido esta realidad, entre ellos la Secretaría de Estado de Igualdad y el Consejo Superior de Cámaras de Comercio de España, que comprobaron que las mujeres ganan un 21% menos de salario fijo que los hombres, y que esto aumenta al 37% por incentivos o complementos. La brecha es mayor entre los más jóvenes donde las mujeres de 16 a 30 años reciben una media de 1.042,75€ menos al año que los hombres. Sin embargo, todo esto podría cambiar en los próximos años, vaticina la consultora de recursos humanos, Hudson.

Las mujeres jóvenes: líderes laborales del futuro

El estudio, denominado "El gran cambio generacional", revela que las mujeres de la Generación Y, las comprendidas entre las edades de 20 y 34 años, presentan una mayor capacidad de liderazgo que sus pares masculinos. Asimismo, el estudio afirma que son éstas mujeres las que pueden finalmente acortar la brecha de desigualdad laboral entre géneros, y romper por vez primera el "techo de cristal".

Para la investigación se han analizado 28.000 test psicométricos, donde se devela la evoluación en las dinámicas de los entornos de trabajo multigeneracionales en España, y donde conviven los nacidos en el Baby Boom (50 - 68 años), con la Generación X (35 - 49 años) y la Generación Y(20 - 34 años).

El estudio analiza los cambios en el liderazgo, factor que sitúa a las mujeres jóvenes en una posición clave para destacarse como líderes laborales del futuro. Sus aptitudes en torno a la confianza social, su orientación al servicio, y su grado de organización y meticulosidad, son notoriamente superiores a sus iguales hombres.

Asimismo, escapan a las habilidades tradicionalmente asociadas al liderazgo, como la persuasión, la confianza o la extroversión, y brindan diferentes y más relevantes, que les permitirán manejarse en un futuro donde primarán las cifras y donde los líderes deberán filtrar el gran volumen de información y tomar decisiones importantes.

El dominio de la mujer sobre el hombre Y

De acuerdo a los datos, las mujeres de la Generación Y han obtenido puntuaciones más altas que los hombres de la misma generación en términos de organización (18% más), habilidades sociales (10% más), confianza social (12%), altruismo (15%), optimismo (4%) y ambición (2%).

Al compararlas con los hombres nacidos en el Baby Boom, las diferencias en estas aptitudes son incluso más notorias, con un 22% en altruismo, un 22% en confianza social, un 16% en habilidades sociales, un 16% más en optimismo y un 21% más en ambición.

El director general de Gestión de Talento de Hudson España, Fernando Guijarro, sostiene que "a medida que las empresas siguen evolucionando y progresando, las mujeres de la Generación Y se encuentran mejor posicionadas que nunca para ocupar los primeros puestos en el mundo empresarial en la próxima década de incertidumbre y cambio”, ya que al tratarse de una fuerza laboral europea multigeneracional, y "las implicaciones que esto conlleva son enormes en relación con las diferencias psicológicas que hay en el modo en que piensan, actúan y lideran estas generaciones".

Afirma además que “ahora que la Generación Y está comenzando a ocupar puestos de dirección, y las personas nacidas en el Baby Boom comienzan a jubilarse, los antiguos referentes ya no son aplicables", y señala que "esta investigación identifica qué es necesario para prosperar -y sobrevivir- en un lugar de trabajo multigeneracional. Gracias a este estudio, podemos ver claramente cómo está cambiando la naturaleza del liderazgo, por lo que las empresas necesitarán estar preparadas para comprender, apoyar y gestionar el comportamiento de las personas de cada grupo”.

Agrega que mientras que los nacidos en el Baby Boom deben intentar aceptar la realidad sin prejuicios, "los miembros de la Generación X deberán situarse en una posición intermedia para convertirse en el necesario punto de conexión entre las personas nacidas en el Baby Boom y la Generación Y", y los más jóvenes "deberán buscar entornos de trabajo donde puedan poner en práctica la motivación y la persuasión, dos características muy adecuadas para su tipo de personalidad".

“Las organizaciones deben comprender qué es lo que motiva a sus empleados y establecer relaciones entre los factores que motivan a personas de distintas edades y que se encuentren en distintos puntos de su carrera. Cualquier empresa que desee formular una estrategia acertada para captar, retener y desarrollar a sus equipos, debe entender primero quiénes son y qué es lo que les apasiona. Como muestra este estudio, el jefe del futuro es muy distinto al jefe de hoy”, reflexiona el director de Gestión de Talento de la consultora.

Actualidad Laboral / Con información de Universia