¿Cómo ayudar a los empleados a que disfruten del descanso y no perder efectividad en las tareas cotidianas? Las vacaciones deberían ser un momento de esparcimiento y la organización previa, un adelanto del disfrute. Sin embargo, según un estudio realizado en 6000 compañías globales por la consultora internacional Grant Thornton International Business Report, 6 de cada 10 ejecutivos no creen que las vacaciones sean una forma de bajar el estrés. ¿Por qué? Los tres motivos que mencionan son:
-La tensión extra por querer dejar todo organizado.
-La imposibilidad de desconectarse.
-La sensación de que los reemplazos no sean los adecuados.
Los departamentos de RRHH tienen aquí un papel fundamental: ayudar de forma estratégica a las compañías para que los empleados puedan descansar sin resentir la productividad.
El primer paso para lograrlo es determinar el sistema a utilizar para la asignación de fechas. Para ello, algunos prefieren sortear los turnos de vacaciones, lo que puede generar diferencias entre los “afortunados” y los que no lo son tanto, sin contar que resulta ineficaz en cuanto a la organización del trabajo. Otros, en cambio, suelen generar discriminación positiva para los que tienen carga de familia, pero este método es injusto con aquellos que no tienen niños o pareja.
El segundo paso es generar un clima de sustentabilidad que permita que los empleados se “desconecten” durante sus vacaciones. Según un estudio realizado por el portal Trabajando.com, el 73% de los empleados revisa mails y/o llamados por cuestiones laborales durante las vacaciones. Es difícil que un empleado innove, cree o genere mejores resultados si no puede ejercitar la inteligencia emocional de saber disfrutar del momento de descanso.
Como tercer paso se encuentra la transparencia en el manejo de la información de las compañías. El permitir conocer a toda la organización cómo se distribuyen las tareas, cuáles son las competencias de cada área y qué objetivos tienen a mediano y largo plazo, son fundamentales para la gestión cuando hay que reasignar recursos y buscar reemplazos. En este punto, RRHH es el área central para poder lograrlo de manera fluida y dinámica.
La organización de las vacaciones del personal resulta así una oportunidad para preguntarnos por las funciones de nuestra área de RRHH: liberarles tiempo de las tareas administrativas para que puedan invertirlo en proporcionar nuevas estrategias de desarrollo para nuestro mayor capital -el Humano- es el nuevo desafío.
Actualidad Laboral / Con información de Terra