Los pequeños están llenos de sabiduría, pues la mayoría de las lecciones importantes que deben aprender se llevan a cabo en el jardín de niños. A medida en que avanzan hacia la adolescencia y madurez, lo recabado en la primera etapa va desapareciendo.
El portal Mashable encuestó a diversas maestras de educación infantil para descubrir las 5 lecciones de vida que los adultos no deben olvidar de la infancia.
Conoce gente nueva
El cambio de rutina no siempre es lo más cómodo, pero representa una parte esencial del crecimiento personal. Al ser adultos, no hay maestros alrededor que te den un empujón suave en circunstancias sociales. Es importante exponernos a nuevos círculos y realizar plática con aquellos compañeros con quienes nunca habías cruzado palabras.
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Si se echa un vistazo a los salones del jardín de niños, te encontrarás con un lugar mucho más agradable, donde no sólo se fomenta el intercambio de lápices de colores.
Compartir todo, desde palabras amables y cumplidos con los amigos o familia es gratificante de muchas maneras.
Cumple las reglas
Aunque en la vida adulta cumples con ciertas reglas, como silenciar tu smartphone o asistir temprano a laborar; también es importante recordar los acuerdos más sencillos que aprendiste cuando niño: ser paciente, esperar tu turno, no empujar, etc.
Toma una siesta
Todos necesitan un descanso al día para recuperarse del estrés laboral. Es necesario que tomes un momento para relajarte, descansar y disfrutar de la autorreflexión en un entorno acogedor.
Antes de los seis años es bastante común que los niños duerman un rato para recuperar energía y volver a sus actividades.
Mantener el orden
Este deber es de sentido común, pero por desgracia no siempre se cumple. El respeto al entorno y al cuidado propio es una lección que sin duda debe seguirse en la vida adulta.
Siempre es una idea vivir conforme a las convenciones sociales: dejar los lugares en mejores condiciones y respetar los territorios ajenos.
Actualidad Laboral / Con información de Mundo Ejecutivo
