Los sindicatos de Reino Unido exigen nueva regulación urgente para evitar que sean los algoritmos los que acaben discriminando a los trabajadores. Que una IA decida a quién se contrata y a quién se despide, fundamentalmente.
El llamamiento llega después de que la pandemia de coronavirus haya acelerado la digitalización y, en consecuencia, fomentado la adopción de herramientas tecnológicas para la gestión de equipos. Herramientas capaces de contratar en remoto, determinar la productividad de los profesionales, y controlarlos aunque se empleen desde sus hogares.
El Trades Union Congress —Congreso de Sindicatos de Oficios— del Reino Unido considera en un nuevo informe que la vigente regulación laboral de Reino Unido está obsoleta y no tiene la capacidad para responder a los desequilibrios que ha introducido la adopción de estas tecnologías en las lógicas del mercado laboral.
Según recoge el Financial Times, "cada vez más empleadores están desistiendo de sus responsabilidades, ya que las asumen máquinas". "Cuando se sustituye a un jefe por un algoritmo, minas la relación personal entre empleadores y empleados", advierte Robin Allen, uno de los abogados que han colaborado en la redacción de este informe de los sindicatos.
La nueva regulación que los sindicatos británicos proponen contemplan la obligatoriedad de que las empresas consulten con las centrales el uso de tecnologías intrusivas "de alto riesgo" en los centros de trabajo. También incluyen un derecho a la desconexión digital que la legislación española ya contempla.
Los trabajadores de la gig economy —riders, por ejemplo— y los profesionales de baja cualificación y salarios minúsculos son los más vulnerables de la algoritmización del trabajo. El TUC destaca en su informe cómo varios trabajadores de Uber Eats fueron despedidos por un sesgo en el reconocimiento facial de su aplicación que afectaría a minorías étnicas.
Frances O'Grady, secretaria general del TUC, lamenta que la tecnología se esté usando "para tomar decisiones que cambian vidas", cuando en el trabajo podría servir "para mejorar la productividad y la vida de los empleados". Andrew Pakes, del sindicato Prospect, advierte que el uso abusivo de tecnologías también se está dando en oficinas.
Y no le gustan los sistemas de entrevistas de trabajo con IA mediante videollamada. "Soy un poco sordo. Siempre parezco que estoy esperando una llamada. ¿Eso me haría parecer menos interesado en la oferta?
Actualidad Laboral / Con información de Business Insider