19-11-2015
Procedimientos paralizados desde 2002, en algunos casos, acumulan las Inspectorías del Trabajo de Venezuela, según los resultados preliminares de una auditoría realizada por el Ministerio del Trabajo. En 9 dependencias intervenidas, (Güiria, Carúpano, Cumaná, Barcelona, Cantaura, El Tigre, Puerto La Cruz, Caucagua e Higuerote) el estudio determinó 40.356 expedientes en la Sala de Inamovilidad, 21.428 en la Sala de Sanciones y 65.835 en la Sala de Reclamos.

El Viceministro para Derechos y Relaciones Laborales, Menry Fernández, dijo que la acumulación de expedientes, es producto de unos “cuellos de botella”, que habrían sido identificados para la implementación del Plan de Actualización del Sistema de Administración de Justicia de Trabajo.

“El Inspector del Trabajo que era uno solo, decidía sanciones, inamovilidad, reclamos, derecho individual, derecho colectivo, sindicato; era cuarto bate y novio de la madrina; tenía que reunirse políticamente con el Gobernador, velar por las cuestiones administrativas de la Inspectoría. Era el todero”, dijo el funcionario.

Aunque no quiere dar fechas sobre el fin de la mora para los trámites solicitados por trabajadores y empleadores, el límite debería ser diciembre de 2016. Así estableció el lapso para terminar con la automatización de los procedimientos, con una plataforma tecnológica diseñada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología y con equipos que serían adquiridos a través del Fondo Chino.

“Desde que llega el trabajador a poner la denuncia, ya eso está automatizado, con un código, un serial, con el Inspector que lo recibió, con las fechas que te da para que los lapsos se cumplan. Este es el inicio de la automatización”, expresó. Eso sería el Sistema Integrado de Procedimientos de Inspectorías y Procuradurías.

Aumentan número de Inspectores del Trabajo

Con el plan, el Despacho del Trabajo decidió dividir las inspectorías, por procesos. Es así como en los estados con mayor cantidad de solicitudes, con mayor volumen de trabajo, serán 4 Inspectores: Inspectoría de Derechos Colectivos, Inspectoría de Inamovilidad, Inspectoría de Reclamos, Inspectoría de Sanciones. Eso para evitar el “inspector todero”, como señaló Fernández.

“Estamos concibiendo las Inspectorías del Trabajo no como un ente aislado dependiente del Ministerio, sino como un sistema de administración de justicia”. Este proceso, agregó, también incluye la revisión de la infraestructura, adecuación de las sedes, entre otros; con eso, podrían estar ubicadas físicamente separadas.

Actualidad Laboral / Adriana Salazar Salas