Una estudio realizado por la Universidad de Helsinkin, y que se ha publicado recientemente en la revista americana ‘Journal of Nutrition, Health & Aging’, asegura que irse de vacaciones prolonga la vida de las personas.
Este estudio, que se desarrolló durante 40 años, incluyó a 1.222 hombres de negocios de mediana edad nacidos entre 1919 y 1934 que fueron seleccionados por el Helsinki Businessman Study entre 1974 y 1975. Todos los participantes tenían al menos un factor de riesgo de tener una enfermedad cardiovascular (fumar, alta presión sanguínea, alto colesterol, triglicéridos altos, intolerancia a la glucosa o sobrepeso).
Tras ser analizados sus comportamientos laborales y de bienestar en un grupo de intervención y otro de control, se concluyó que los periodos de vacaciones más cortos estaban asociados con más probabilidad de muerte en el grupo de intervención.
Los trabajadores que se tomaron tres semanas de vacaciones o menos al año tenían un 37% más de probabilidades de morir entre 1974 y 2004 que aquellos que se tuvieron más tiempo de descanso.
"El daño causado por un régimen de estilo de vida intensivo estaba concentrado en un subgrupo de hombres con vacaciones anuales más cortas. En nuestro estudio, hombres con menos vacaciones trabajaron más y durmieron menos que aquellos que tuvieron más vacaciones", explica el investigador Timo Strandberg, de la Universidad de Helsinki.
Strandberg señala que la gestión del estrés no formaba parte de la medicina preventiva en la década de 1970 pero ahora está recomendado para las personas con riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular. Además, en la actualidad existen medicamentos más efectivos para reducir los lípidos y la presión sanguínea.
Actualidad Laboral / Con información de LaInformacion