El número de estadounidenses que presentó nuevas solicitudes de subsidios por desempleo cayó a cerca de un mínimo de 49 años en la última semana, en una señal de que la solidez del mercado laboral sigue apuntalando al crecimiento económico.
El mercado laboral, que se considera que está cerca o en pleno empleo, está impulsando constantemente el crecimiento de los salarios, lo que podría apoyar el gasto de los consumidores cuando el estímulo del recorte fiscal de 1,5 billones de dólares del gobierno de Trump se desvanezca.
“El avance del mercado laboral sigue siendo fuerte y esperamos que la tasa de desempleo siga disminuyendo”, dijo John Ryding, economista jefe de RDQ Economics en Nueva York.
Los pedidos iniciales de beneficios estatales por desempleo cayeron en 8.000, a una cifra desestacionalizada de 207.000, en la semana hasta el 29 de septiembre, dijo el jueves el Departamento del Trabajo.
El resultado revirtió la mayor parte del aumento de la semana anterior, luego que el huracán Florence, que azotó Carolina del Norte y del Sur a mediados de septiembre, impulsó los pedidos.
Economistas consultados en un sondeo de Reuters proyectaban una caída de los pedidos a 213.000 para la semana pasada. El dato de la semana previa fue revisado para mostrar 1.000 solicitudes más que las inicialmente reportadas.
El promedio móvil de cuatro semanas, considerado una mejor medida de las tendencias del mercado laboral porque reduce la volatilidad, aumentó en 500 pedidos, a 207.000, la semana pasada.
Los datos de pedidos no tienen relación con el informe de empleo de septiembre que se publicará el viernes. Según una encuesta de Reuters a economistas, las nóminas no agrícolas probablemente aumentaron en 185.000 en septiembre, luego de un alza de 201.000 en agosto. Se pronostica que la tasa de desempleo caerá una décima de punto porcentual, a un 3,8 por ciento, un mínimo de 18 años en mayo.
En otro informe, el Departamento de Comercio dijo el jueves que los nuevos pedidos de productos fabricados en Estados Unidos tuvieron su mayor aumento en casi un año en agosto, pero las señales de debilidad del gasto empresarial en equipos sugirieron que la fabricación podría estar disminuyendo.
Los pedidos de productos de fábrica aumentaron un 2,3 por ciento, el mayor incremento desde septiembre de 2017, impulsado por un aumento en la demanda de aviones, después de caer un 0,5 por ciento en julio. Los pedidos aumentaron un 8,6 por ciento interanual en agosto.
Actualidad Laboral / Con información de Reuters
