22-06-2016
Mitsubishi Motors proyectó este miércoles una pérdida neta anual de 1.400 millones de dólares, la primera en ocho años, debido a fuertes costos por compensaciones y menores ventas tras el escándalo de manipulación de datos de consumo de combustible de sus autos.
La compañía admitió en abril que exageró los datos de consumo de combustible en cuatro de sus minivehículos, problema que atribuyó a la presión por la competencia y una débil supervisión. El escándalo llevó a Nissan Motor Co a adquirir una participación mayoritaria de un tercio de la automotriz japonesa.
Mitsubishi prevé que registrará una pérdida extraordinaria de 150.000 millones de yenes (1.400 millones de dólares) por los costos de compensar a los clientes de los vehículos afectados, y también por pagos a Nissan, proveedores y operadores para compensar la caída en las ventas.
La empresa espera ver afectados sus ingresos en 55.000 millones de yenes, debido mayormente a una caída de casi 50% en las ventas minoristas domésticas como consecuencia del escándalo.
"A nivel doméstico, el impacto de la interrupción de las ventas y la producción de minivehículos alentará una caída de 60.000 automóviles respecto al año pasado", dijo el director ejecutivo Yoshihiro Kuroi a la prensa. Mitsubishi vendió 102.000 unidades en Japón el año pasado.
También está anticipando menores ventas de vehículos en Europa y algunas otras regiones así como una caída en las ganancias por tipos de cambio menos favorables.
Las pérdidas proyectadas se producirían tras un declive de un 39% en la ganancia neta a 72.600 millones de yenes en el último ejercicio, cuando Mitsubishi también anotó una pérdida especial vinculada al escándalo.
Actualidad Laboral / Información de Reuters
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