La Organización Internacional del Trabajo (OIT) afirma que el mundo laboral asiste a un cambio constante por la llegada de nuevas tecnologías. Con ellas, las formas de cumplir tareas van mutando y pueden generar riesgos para los trabajadores.
El director de la OIT para el Cono Sur, Fabio Bertranou, participó ayer en el seminario "Diálogo tripartito sobre el futuro del Trabajo" y señaló que históricamente los cambios tecnológicos se plantearon como una amenaza de pérdida de trabajo. Sin embargo, esa amenaza no se cumplió. "Cambió la naturaleza y la forma de distribución" del empleo, dijo.
"El mundo del trabajo está en un cambio constante. La irrupción de la tecnología y la digitalización está cambiando la forma en que se hacen las cosas y nos lleva a repensar cómo eso impacta en el empleo, pero también cómo se organiza el trabajo alrededor de esas nuevas formas", sostuvo.
Bertranou indicó que en la actualidad las empresas están modificando la manera de organizar y gestionar sus activos y recursos. Y allí, lanzó una alerta sobre esas nuevas modalidades de empleo.
"El modelo de trabajo amigable, flexible, en cualquier momento y en cualquier lugar con un teléfono conectado con el jefe a cualquier hora, podría convertirse fácilmente en un trampa del tipo 'siempre y en todas partes' donde algunos trabajadores estarían expuestos a este tipo de forma de aumentar la producción de su trabajo y tendría efecto importantes en el estrés o el burnout (fatiga extrema)", expresó el experto.
Ante esa realidad, señaló que la gran discusión a dar sobre el futuro del empleo es dónde se van a generar nuevos trabajos, y cuáles van a ser las demandas y las características.
También habrá que ver "si estos empleos van a requerir una forma de aprendizaje y de enseñanza de los trabajadores distinta", manifestó el jerarca de la OIT.
Planteó además la interrogante si se crearán más o menos empleos de los que se perderán como consecuencia de los cambios tecnológicos. Señaló que ante la nueva realidad de los cambios tecnológicos se deberán definir políticas para la regulación de esos trabajos, las relaciones laborales y la protección social.
En otro orden, añadió que en las últimas décadas hubo una tasa de generación de empleo en la región muy por debajo del incremento del Población Económicamente Activa (PEA). Ante eso, dijo que "hay una gran incertidumbre sobre cómo va a evolucionar la generación de puestos de trabajo".
Actualidad Laboral / Con información de El Observador