24-04-2020

El compromiso asumido por los Ministros de Trabajo y Empleo de los países del G20 de mantener una “cooperación mundial plena” a fin de salvaguardar los empleos y los ingresos de la población, dentro de la crisis del COVID-19 ha sido acogido con satisfacción por el Director de la OIT, Guy Ryder y ha advertido que las medidas de apoyo actuales no son suficientes.


“A medida que la crisis se extienda a los países de ingresos bajos y medios, tendremos que hacer mucho más para proteger a los trabajadores y ayudar a las empresas, pues estos países están menos preparados para una crisis. De lo contrario, la combinación de grandes economías informales y escasa cobertura de protección social provocará una catástrofe para la población y las economías”, dijo Ryder.


“Nuestro propósito debería ser ayudar a estos países a asistir a sus poblaciones, a capear la crisis, y a reconstruir mejor. Necesitamos la solidaridad mundial para respaldar la inversión en estas economías, en su renovación social y ambiental, en su población y en las instituciones laborales que protejan eficazmente a los trabajadores y a sus familias. De lo contrario, se agravarán las ya profundas desigualdades, se agudizará la pobreza, se perderá el avance social, y el camino hacia la recuperación será peligroso”, añadió.


En una declaración publicada después de la reunión extraordinaria virtual celebrada el 23 de abril, los Ministros del G20 se comprometieron a mantener “una cooperación mundial plena …, a aplicar un enfoque centrado en las personas para promover el empleo, reforzar la protección social, estabilizar las relaciones laborales y promover los principios y derechos fundamentales en el trabajo .”


“Respetar los derechos fundamentales de los trabajadores y el diálogo efectivo con las organizaciones de trabajadores y de empleadores es la única vía para forjar una recuperación sólida, justa y global, y para conseguir la necesaria ayuda del público para ejecutar las medidas."


Tras su intervención en la reunión, Ryder acogió con satisfacción el respaldo de los ministros a la importancia del diálogo social para idear soluciones a la pandemia que sean apropiadas y duraderas.


“Respetar los derechos fundamentales de los trabajadores y el diálogo efectivo con las organizaciones de trabajadores y de empleadores es la única vía para forjar una recuperación sólida, justa y global, y para conseguir la necesaria ayuda del público para ejecutar las medidas”, señaló.


La OIT ha propuesto reaccionar a la pandemia del COVID-19 con una respuesta política integrada basada en cuatro pilares. Esto incluye: ayudar a la economía y el empleo; ayudar a las empresas, a los puestos de trabajo y los ingresos; proteger a quienes trabajan durante el confinamiento, y cuando la economía vuelva a ponerse en marcha; y recurrir al diálogo social.


 Actualidad Laboral / Con información de OIT