21-10-2020
 

La pandemia del coronavirus golpea con fuerza la industria textil y ha dejado en el aire a muchos de los 65 millones de trabajadores de ese sector en Asia, donde las fábricas cierran o enfrentan dificultades y rebajan los sueldos. La Organización Internacional del Trabajo pide que se haga más por proteger a esos trabajadores.


La OIT emitió un informe según el cual las exportaciones de los principales productores asiáticos bajaron un 70% en la primera mitad del 2020 y siguen por debajo de los niveles previos a la crisis. Las fábricas cierran o producen menos, y muchos trabajadores se quedan sin empleo.


Si bien esto tiene graves consecuencias para los trabajadores del sector —la mayoría de ellos mujeres—, la pandemia ofrece a las empresas de indumentarias la oportunidad de hacer que las cadenas de suministros sean más sólidas, sustentables y “centradas en los humanos”, según Christian Viegelahn, economista de la oficina de la OIT en Bangkok.


Agregó que la recuperación total del sector dependerá de que se supere la pandemia y que probablemente eso no ocurra antes del 2022.


Ofrecer reaseguros a los trabajadores del sector, que no tienen cómo responder cuando se quedan sin empleo en países como Bangladesh, Camboya y Myanmar, es vital, de acuerdo con los investigadores de la OIT.


El informe de la OIT evaluó las condiciones en diez países exportadores de indumentarias de la región de Asia y el Pacífico: Bangladesh, Camboya, China, India, Indonesia, Myanmar, Pakistán, las Filipinas, Sri Lanka y Vietnam. La región representa tres cuartas partes de los empleos en el sector textil.


Casi la mitad de esos empleos dependen de las exportaciones a los países ricos de Occidente, que soportan fuertes brotes del COVID-19 que afectan el comercio. El estudio reveló que los trabajadores perdieron un promedio de dos a cuatro semanas de trabajo. Y solo tres de cada cinco empleados fueron llamados a trabajar cuando sus fábricas reabrieron tras un cierre por el virus.


El estudio de la OIT fue hecho por la Universidad Cornell y por un equipo de la OIT que incluyó expertos de organizaciones como Better Work, que procura mejorar las condiciones del sector.


Actualidad laboral / Con información de AP