Que el año 2015 presentará mayores dificultades que este próximo a concluir, fue una máxima para los facilitadores que participaron en la Jornada Perspectivas de Recursos Humanos para el 2015, que llevó a cabo la Asociación Venezolana de Gestión Humana.

Este encuentro que se realizó en un hotel de la capital, reunió a la alta gerencia, presidentes, vicepresidentes, directores de planificación, gerentes de recursos humanos y consultores organizacionales de diversas empresas del país.

El marco legal seguirá siendo punitivo y sancionatorio

Emma Neher, socia internacional de Juan Carlos Varela & Asociados, miembro de Littler Mendelson, dijo que para 2015 se vislumbra un impulso a la creación de los Consejos de Trabajadores por lo que las empresas deben prepararse para lidiar con diversas organizaciones de representación de los trabajadores.

Considera la abogado que es muy probable que salga el reglamento de la Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y Trabajadoras –LOTTT-, aunque sea en forma parcial. También prevé que continuarán los procesos sancionatorios y represivos hacia las empresas.

Neher sugiere a las organizaciones anticipar los escenarios, designar personas idóneas para enfrentar las fiscalizaciones e inspecciones e involucrar a los trabajadores en los problemas y decisiones de la empresa, entre otros. También considera importante entrenar y capacitar la recurso humano, así como reforzar las actividades de responsabilidad social empresarial.

Fuga de talento, el problema

La fuga de talento humano se presenta como uno de los mayores problemas para las empresas y esto se expresa porque, según señala Asdrúbal Oliveros continuará la caída del poder adquisitivo en un marco de inflación que Ecoanalítica proyecta para el 2015 entre 96 y 110%, con aumento de salario promedio de 65%, es decir, siempre por debajo de la inflación.

 



 

El economista explicó que “este gobierno perdió la noción de hasta dónde arroparse la cobija” y que trata de cerrar la brecha del déficit fiscal con la inyección de bolívares a la economía.

Sin embargo, Venezuela tiene una altísima necesidad de dólares para cubrir la necesidad de importaciones en una economía que no está produciendo, los problemas se van a incrementar ante la escasez de divisas. Oliveros señaló que por esto el gobierno se verá obligado a hacer un ajuste cambiario. Para el expositor si el gobierno optara por un cambio único, el precio del dólar debería estar por el orden de los Bs. 36,50.

Construcción conjunta trabajadores-empresa

Para el coordinador nacional de Frente Autónomo para la Defensa del Empleo el Salario y el Sindicato –Fadess- Rodrigo Penso, expresa que la exhortación de los trabajadores a la gerencia de las empresas venezolanas “es establecer un vínculo más estrecho con el sindicalismo autónomo en función de asumir en conjunto la defensa de las empresas, de la estabilidad laboral, de la producción nacional y de alguna manera la defensa del futuro de Venezuela”.

 



 

Considera el sindicalista que “debemos plantearle al gobierno que es necesario cambiar de política y cambiar de rumbo, que esto que hemos tenido hasta ahora no conduce sino a una crisis y en ese sentido creemos que hay que construir en forma conjunta un nuevo discurso que le de esperanzas a la gente y que defienda los puestos de trabajo, que defienda a la empresa y que defienda a la producción nacional en sustitución de las importaciones”.

Penso explicó que la mejor política salarial es una política antiinflacionaria y esa política comienza por “corregir los desequilibrios macroeconómicos e incentivar la producción nacional y sustituir las importaciones, dejar de acorralar a la empresa privada y entender que el Estado solo no puede asumir toda la economía porque es un desastre”.

La desobediencia organizacional

“El contrato laboral que recoge temas salariales, responsabilidades, estructuras es cada vez menos efectivo”. La expresión pertenece a Raúl Briceño, Director General de Conestructura quien explica  que los trabajadores se están planteando que el contrato laboral no es lo que va a hacer que ellos permanezcan en las organizaciones.

 



 

Por ello, señala el especialista hay que potenciar lo que se denomina el contrato emocional, que contiene otros elementos como coaching, balance vida-trabajo, flexibilidad.

Dice además que se va a potenciar un fenómeno que ya está ocurriendo y que llaman “desobediencia organizacional” y que eso es algo que deben tener en cuenta los gerentes de talento humano, porque no siempre es un elemento negativo o irruptivo, es simplemente “una respuesta” y como respuesta puede expresarse “para avanzar e innovar”.

Actualidad Laboral / Noemí Cendón Tizón