Grupos económicos estarían detrás de los llamados “bachaqueros”, capaces de evadir los sistemas de control que establece el Estado venezolano. Así lo considera el presidente de Fedeindustria, Miguel Pérez Abad, quien los califica como “una expresión social pero con un mecanismo económico especulativo muy bien armado, muy bien montado, con sistemas logísticos muy sofisticados, que coloca los productos en mercados internacionales a precios con ganancias exorbitantes”.

Estos bachaqueros, o revendedores, consiguen los productos de la canasta básica que tienen precios regulados, y los venden a 3 veces o más del precio controlado por el Estado. Éste es uno de los factores que impide a la familia venezolana cubrir las necesidades básicas.

Y ante ello, el dirigente empresarial, representante de la pequeña y mediana industria, plantea un sistema de armonización de precios, que permitiría ajustarlos, sin levantar el control gubernamental. “Creemos que hay un trabajo por hacer, que no es vender los productos al valor que marca el bachaqueo, pero sin embargo, una tasa promedio que cierre ese tremendo estímulo”, dijo.

Pero eso, a su juicio, debe ir acompañado de un sistema de armonización de sueldos y salarios “necesitamos preservar, para que la economía siga en marcha, el poder adquisitivo de la familia venezolana”. Esto también sería una manera de salirle al paso al impacto del bachaqueo. Pérez Abad, dio estas declaraciones a la radio capitalina Unión Radio.


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